Narco mexicano “El Chapo” dice que es un simple agricultor
26 de marzo de 2014
No tiene correo electrónico, no recuerda su número telefónico, se declara agricultor y no consume drogas ni tiene tatuajes. Esas son algunas de las respuestas que dio el famoso líder del Cartel de Sinaloa, Joaquín Guzmán Loera, quien fue arrestado el 22 de febrero en un edificio en la localidad de Mazatlán, Sinaloa (México), tras estar prófugo más de trece años y ser el narcotraficante más buscado del mundo.
Pero en sus respuestas ante un agente del Ministerio Público y un abogado parece ser otra persona. La entrevista fue realizada un día después de su detención en el Centro Federal de Readaptación Social número 1, según el periódico mexicano Excélsior, que tuvo acceso en exclusiva a la declaración. En ella, por cierto, El Chapo dice no conocer a nadie del crimen organizado y descarta pertener a algún cartel de drogas.
Además, afirmó que ganaba al mes unos 20.000 pesos mexicanos (1.200 euros, aproximadamente) gracias a que cultiva “granos de maíz, sorgo, frijol y cártamo”. El hombre por el que alguna vez se ofreció una recompensa de dos millones de euros fue capturado en una operación de la Marina mexicana, que encontró al narcotraficante en un modesto edificio de departamentos donde era vecino de jubilados.
Escapando por drenajes
Al momento de su captura, Guzmán estaba con Emma Coronel, una exreina de belleza de Sinaloa con la que se casó en 2009, cuando ella tenía 18 años. Ambos tienen dos hijas, que también estaban presentes cuando llegaron los funcionarios militares al lugar. Allí sorprendieron también a un guardaespaldas (un exmiembro del Ejército mexicano) y dos empleadas. No hubo un solo disparo en el operativo.
Guzmán había evadido a la Justicia apenas unos días antes de su captura, cuando consiguió escapar en Culiacán de los agentes mexicanos gracias a una red de túneles que se hizo construir para casos de emergencia y que conectaba con el drenaje de la ciudad. En la zona era conocido por repartir dinero, visitar restaurantes y pagar la cuenta de todos, entre otras dádivas. Pocos días después de su captura, hubo una marcha pidiendo que fuera liberado.
En su declaración, en tanto, Guzmán dijo estar casado con Alejandrina Salazar, madre de cuatro de sus hijos. Al final de su breve declaración ante la Justicia, Guzmán aseguró que “no presento lesiones ni deseo denunciar a nadie”, afirmó que ha sido tratado “muy bien por parte del licenciado” y agregó que “sí fueron respetados mis derechos humanos por parte del personal que me declaró”.
DZC (dpa, Excelsior, Reuters)