Música de "Los de Abajo"

La tienda del circo está abarrotada de gente, el calor es sofocante y el olor a cerveza vibra en el aire al igual que la estrofa que canta Tania Melo: “Soy una mujer que domina el miedo. Una guerrera invencible soy de acero. Cuando se trata de luchar, me importa poco cuantas lágrimas tengo que rodar. Hoy mi voz es tu voz y la vamos a elevar. Hoy no queremos ser mejor, queremos igualdad.”

La canción trata de los problemas de género en México, el país de origen de los miembros de la banda “Los de Abajo”. Como músicos intentan combinar su parte artística con una parte más bien política. “Todas nuestros temas tienen un mensaje. Con las letras queremos mostrar que sabemos que México está pasando por momentos difíciles y que no somos ciegos ante la situación”, dice Mauricio Diaz, saxofonista y segunda voz de la banda, “tratamos de conseguir un cambio de actitud, y de mostrar que las cosas podrían funcionar de otra forma.”

Interpretación de la realidad mexicana

Radicada en la ciudad de México, la banda compuso la pieza “Mexican Underdogs” el año pasado buscando compartir con una audiencia internacional su interpretación de la situación energética en su país. “La clase política en México lleva ya un tiempo privatizando el sector energético del país y vende los energéticos a empresas extranjeras”, dice Mauricio y añade que “el fracking es realmente un problema que va a llegar a una crisis económica muy destructiva.”

Para que más gente en el mundo se entere de ese y otros mensajes, la banda está colaborando con artistas de otros países como Alemania o los Estados Unidos integrando sonidos y idiomas diferentes. Sin embargo, las melodías siguen acercándose a las raíces mexicanas mezclando los estilos salsa, skar, merengue y punk. Además, “Los de Abajo”están actualmente en su undécima gira europea, hasta principios de agosto, sobre todo en los escenarios de festivales alemanes.

Un concierto fenomenal en Bremen

Durante su concierto este sábado (18.07.2015) en el festival “Breminale” en la ciudad de Bremen en el norte de Alemania, dónde el dique al lado del río se convirtió en un panorama lleno de stands de comida, bebida y ropa alternativa y capas de circo durante cinco días, enfervorizaron a sus espectadores. “Estamos muy contentos con este ambiente festivo. La gente es muy feliz, va pasando de un escenario a otro, tomando una cerveza tranquilamente y a la vez disfrutando de la música”, dice Mauricio.

Y esta alegría se les notó. La banda enseño a su audiencia a bailar salsa e incluso bajó del escenario con la mayoría de sus instrumentos para tocarlos en medio del público hasta que a la una de la mañana, la moderadora, Carolina Quesada, subió al escenario para terminar el concierto diciendo que por el volumen de la música iba a venir la policía, por el reposo nocturno.