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Muerte por hipotermia: ¿qué sucede en nuestro cuerpo?

24 de noviembre de 2022

El invierno está a la vuelta de la esquina en el hemisferio norte y con él, el frío. ¿Es peligroso cuando la temperatura del cuerpo desciende?

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El invierno llegó a Kiev: mujer transporta a un chico en trineo.
En Ucrania, la gente teme que el Ejército ruso destruya las centrales eléctricas y por lo tanto las fuentes de calor. Imagen: Metin Aktas/AA/picture alliance

La temperatura corporal de 36,5 a 37 grados centígrados es ideal para los seres humanos, y también para trabajar. Nuestro metabolismo y todos nuestros órganos dependen de esa temperatura para funcionar bien. Esta es la razón por la que nuestro cuerpo hace todo lo posible para mantenerla.

Termostato incorporado

Nuestro cuerpo utiliza receptores para medir la temperatura. Si esta cae bruscamente, intenta activar el metabolismo para mantener la temperatura en equilibrio.

Cuando ingerimos alimentos, estos se trituran y se transforman de tal manera que las células puedan absorber los nutrientes. Además, el metabolismo también se encarga de calentar el cuerpo. Cuando hace frío, por ejemplo, este necesita más energía, y los vasos sanguíneos se contraen para que no se derroche demasiado calor.

Del frío en los dedos a la hipotermia

Sin embargo, si a las células les falta sangre, se vuelven quebradizas y nuestro cuerpo comienza a sentir dolor: primero en los dedos de las manos y los pies, en la nariz y en las orejas. Si la temperatura corporal sigue bajando, entonces en los órganos vitales, como el corazón, los pulmones y el cerebro. Estos solo funcionan de forma limitada. Si la temperatura corporal baja dos grados más de lo normal, se produce hipotermia. Para protegerse ante esta situación, nuestro cuerpo trabaja más duro, los músculos se activan, y temblamos en todo el cuerpo.

Dejar de temblar, mala señal

Cuando el cuerpo alcanza la temperatura de 32 grados centígrados, deja de temblar, lo que no es una buena señal. Esto significa que ya no tiene energía, ni siquiera para temblar. Nuestro cerebro y las terminaciones nerviosas ya no transmiten señales, y nuestros brazos y piernas se entumecen. En esta fase, dejamos de sentir dolor, pero apenas podemos movernos, y ni hablar ni pensar con claridad. Nos sentimos confundidos y desorientados. Llegados a este punto, el cuerpo solo funciona a un ritmo muy bajo, porque activó su sistema de emergencia.

Cuidado con el alcohol

Hay gente que cree que puede ayudar al cuerpo con un poco de alcohol, y eso es falso. Al principio, el alcohol puede dar la impresión de que sentimos un calor acogedor, porque nuestros vasos sanguíneos se dilatan. Pero en verdad, el cuerpo bombea sangre caliente, que se enfría con más rápidez. Sentimos calor en la superficie de la piel, pero el propio cuerpo se congela. Nuestros órganos dejan de estar bien abastecidos de sangre, y la temperatura corporal continúa descendiendo. Las temperaturas bajo cero nos paralizan, y con cada grado a la baja, es más peligroso.

Si la temperatura corporal desciende por debajo de los 29,5 grados centígrados, el cerebro deja de funcionar. Estamos inconscientes, entre la vida y la muerte. Nuestro corazón trabaja menos: en lugar de 60 latidos por minuto, solo late una o dos veces. La sangre ya no puede bombearse por todo el cuerpo con rapidez. Esta situación puede derivar en muerte por hipotermia, casi con seguridad. 

(rmr/ers)