Ministra de Familia: kindergarten obligatorio
24 de abril de 2006"Tendría sentido hacer obligatorio, a mediano plazo, el último de los tres años de kindergarten en Alemania", dijo la ministra en rueda de prensa. Particularmente importante es que los niños extranjeros vayan al kindergarten.
Su idea de crear un año obligatorio de kindergarten es para von der Leyen parte integral de la tarea educativa de esa institución, tan alemana que incluso su nombre ha pasado a formar parte de numerosos otros idiomas idiomas.
Gran importancia tiene para la ministra la obligación de un año de preescolar sobre todo para los niños extranjeros. Sabido es que, efectivamente, en numerosas familias turcas cuyos padres o madres vinieron a Alemania a trabajar, el idioma alemán se habla poco.
"No saben ni su idioma materno ni el alemán"
Al final, los chicos no saben bien ni el turco, porque no lo escriben, ni el alemán, porque no lo hablan. "Un año de kindergarten obligatorio mejoraría notablemente los conocimientos de alemán de esos chicos y su comportamiento en grupos".
Lo segundo hace referencia a algunas tendencias machistas en algunas familias extranjeras, donde el varón, aunque sea menor, lo puede todo y es el "niño mimado" y las niñas están bajo estricto control. Una educación de ese tipo crea naturalmente problemas en grupos socializados de otra forma.
La ministra quiere salir al paso temprano a ese tipo de problemas, con la obligatoriedad de un año en las guarderías preescolares. Que ese año alcance para generar un cambio esencial en las conductas es harina de otro costal.
Preparar a todos los niños para la escuela
El primer ministro del Estado de Baden Wurttemberg, Günther Oettinger (democristiano) apoya la idea de la ministra: "Un año de kindergarten obligatorio es necesario. De esa forma podremos preparar óptimamente a todos los niños para la escuela."
En mente tiene el Primer Ministro seguramente no sólo a los niños extranjeros, sino también a los alemanes de hogares menos privilegiados, que no son pocos. "Todo niño debe estar bien preparado para comenzar a ir a la escuela, ya sea alemán o extranjero", dice Oettinger.
Y agrega: "El kindergarten es, junto con la familia, el lugar más importante para practicar la lengua, el comportamiento social y la capacidad de concentración."
Oettinger anunció que hablará con responsables de guarderías, los municipios, las Iglesias y otras instituciones del sector, para "ver si lo podemos llevar a la práctica", por lo menos en su Estado.
Los Estados rechazan la idea
La idea de von der Leyen es rechazada, sin embargo, por la mayoría de los Estados. Y como éstos tienen las competencias en cuestiones de educación, y no la Federación, las perspectivas no son muy buenas para la idea de la ministra.
El Primer Ministro de Turingia, por ejemplo, Dieter Altahaus (también democristiano, como la ministra) dice: "No vemos necesidad de actuar. En el tercer año, nuestros kindergarten están ya casi repletos, con un 97% de lugares ocupados."
También el Primer Ministro de Renania del Norte Westfalia, Jürgen Rüttger (también democristiano), dijo que no ve necesidad alguna de hacer obligatorio el último año de guardería.
Frente cerrado opositor
También los jefes de Gobierno de los Estados de Baja Sajonia, Baviera, Berlín, Brandeburgo, Bremen, Hamburgo, Renania- Palatinado, el Sarre y Sajonia se manifestaron en contra.
El Estado de Baviera, por su parte, sigue por otra senda. Los niños extranjeros que viven en el Estado pueden ser escolarizados sólo si aprueban una prueba de alemán. Si no la aprueban, deben concurrir a un curso obligatorio de alemán de 160 horas. Los padres que se nieguen a enviar a sus hijos al curso de alemán deberán pagar una multa.