Militantes del partido de Merkel rechazan matrimonio gay
24 de julio de 2015
Una primera consulta entre militantes llevada a cabo en Berlín por la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller alemana, Angela Merkel, sobre el matrimonio homosexual, ha ratificado la oposición de los conservadores a esa fórmula de unión. Según informó este viernes (24.07.2015) tras el escrutinio de los votos el secretario general de la CDU de Berlín, Kai Wegner, el 45 por cienti de los militantes que participaron en la consulta rechazaron el matrimonio entre personas del mismo sexo, frente al 35 por ciento que lo apoyaron.
El resto se decantó por una de las tres opciones intermedias planteadas en la consulta interna, a favor o en contra con determinadas condiciones y el voto en blanco. Votaron 4.800 personas, casi el 40 por ciento de los militantes de la formación en la ciudad-estado.
El resultado confirma el apoyo de las bases a la línea oficial del partido incluso en Berlín, considerada una de las ciudades más liberales del país y uno de los principales destinos del turismo gay en Europa.
Mientras en países europeos, como la católica Irlanda, o en Estados Unidos se ha avanzado en los últimos meses en la legalización de los matrimonios entre personas del mismo sexo, en Alemania los homosexuales sólo tienen la posibilidad de registrarse como parejas de hecho. Esta fórmula se aprobó en tiempos de la coalición entre socialdemócratas y verdes liderada por el canciller Gerhard Schröder -entre 1998 y 2005- y entonces se consideró un hito en la lucha por los derechos de los homosexuales.
Desde entonces, se ha avanzado en la eliminación de leyes discriminatorias, especialmente en materia fiscal, pero sigue sin contemplarse la posibilidad del matrimonio civil y tampoco la adopción de hijos por las parejas del mismo sexo. Merkel ha reconocido en varias ocasiones en las últimas semanas la existencia de un debate con distintas opiniones, incluso en el seno de su partido, pero ha insistido en que para ella el matrimonio debe ser entre un hombre y una mujer. (EFE)