Medidas contra el tráfico de mujeres

La Oficina Federal de Investigaciones Criminales de Alemania informa que el 17% de las mujeres que ingresan al país y ejerce la prostitución lo hace involuntariamente. Se trata aquí de tráfico de mujeres. Se estima que 40.000 prostitutas ingresarán a Alemania para trabajar durante el Mundial de Fútbol 2006. La probabilidad de que el evento internacional fomente la prostitución forzada y la trata de blancas ha movido a algunas organizaciones a incrementar sus campañas de información y presión.

Para el Mundial, en concreto

Una comisión del Parlamento Europeo aboga por un plan de medidas conjunto para combatir la trata de mujeres y niños; en especial se pide a Alemania que tome medidas concretas para combatir el tráfico humano durante la Copa del Mundo. Aunque para los países en los que la prostitución está prohibida, que en Alemania se esté construyendo mega burdeles para ofrecer servicios sexuales a los amantes del fútbol y el que algunas ciudades hayan puesto a disposición terrenos en las afueras de las ciudades para que, en carromatos, se pueda albergar a las prostitutas podría parecer ya un horror. Sin embargo, no es esto lo punible pues "la prostitución es una cosa legal tanto en Austria como en Alemania y otros países europeos", explica Christa Prets, del Partido Socialdemócrata de Austria, miembro de la comisión permanente de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género.

"El punto es cuánto de estas mujeres han sido obligadas a ello. Aunque existe una visa por tiempo limitado para poder ejercer la prostitución legalmente, que tengan una visa no significa que hayan venido voluntariamente", añade.

La propuesta de medidas concretas para combatir el tráfico humano, rebasan obviamente el marco del Mundial. Si embargo, si se conoce que durante ese tiempo la probabilidad de que el volumen de prostitución forzada aumente, las autoridades deberían incrementar también las medidas de protección de las víctimas y la presencia policial.

Medidas conjuntas

Entre las medidas propuestas por el Parlamento Europeo se encuentran campañas de información en los países en donde se suele "reclutar" prostitutas. "Que se empiece en las escuelas, explicándoles a las niñas que si están ilegales no tienen ninguna posibilidad de salir bien paradas", recalca Prets, añadiendo que justo en esas regiones habría que intensificar la ayuda al desarrollo. "Claro queda que es la pobreza lo que lleva a muchas a buscar esa salida, con esperanza de lucro", dice Prets, puntualizando que la tarea es cómo determinar en qué medida hay presión detrás de una decisión así.

"El cuestionamiento es bajo qué medios de presión ellas se van, cómo son vejadas y obligadas, encarceladas, dejadas sin documentación, amenazadas de que contarán en casa todo lo que han hecho fuera del país. Y no pueden volver a su país. ¿Que pueden ganar dinero con ello? Todas las que lo hacen voluntariamente son libres de hacerlo, pero cuando hay de por medio violencia hay que actuar con rigor", dice Prets.

El rigor

El rigor se entiende como penalización a quien utilice conscientemente los servicios de una mujer que ha sido obligada a la prostitución y para los que hacen negocio con ello. "En caso de sospecha, los clientes deberían tener la posibilidad de atestiguar anónimamente. El bochorno de reconocer la visita a un burdel se evitaría con ello", opina Prets, quien confía en que esas medidas ayudarán a llegar y a penalizar a las mafias de tratantes de blancas.