Meca del arte por cinco días
29 de octubre de 2004Art Cologne brilla con grandes nombres como Picasso, Warhol, Giacometti, Christo, Polke, Richter o Struth. Tampoco el número de galerías que participan, 250 de 22 países, es reducido. Aún así, la feria no deja de sentir la gran presión proveniente de la competencia a nivel internacional que se viene a sumar a la competencia tradicional de grandes contrincantes como Art Berlin, Frieze London o FIAC París.
En esta ocasión se buscará sin éxito a grandes galerías que hasta ahora solían estar presentes a orillas del Rin. No sólo grandes comerciantes de arte de Londres o Nueva York, incluso los más cercanos de Berlín, han desistido en esta ocasión. Colonia parece haber dejado de ser el punto de encuentro por excelencia en el mundo del arte. Muchos coleccionistas y directores museales prefieren visitar otras ferias en Berlín, Londres o Miami para adquirir sus nuevas colecciones.
Los coleccionistas del futuro
Ante este escenario, el director de Art Cologne, Gérard A. Goodrow, ha desarrollado una estrategia encaminada a atraer la atención tanto de artistas como de coleccionistas jóvenes. Detalles visibles, como los carteles que promocionan la feria, reflejan el esfuerzo. La palabra “New” antecede casi todo mensaje. “New Art”, “New Contemporaries”, “New Talents”, el esfuerzo por lograr un nuevo posicionamiento de la Art Cologne se concentra en lo novedoso, lo inesperado, lo fresco. Goodrow espera que con los “nuevos” artistas se logre despertar el interés de un “nuevo” público. El esfuerzo va reforzado con una serie de eventos, desde fiestas con pinchadiscos de renombre internacional e incluso un desfile de modas.
Junto a la exposición principal se ha abierto, en un edificio cercano, una exhibición de artistas jóvenes. Presentes están precursores del arte joven neoyorquino como Robert Miller, Greene Naftali o Michelle Maccarone. Sorcha Dallas o Transmission de Glasglow, los IBID Projects de Londres o Vilnius, o Eva Presenhuber de Zürich también han asistido al encuentro. Una tercera parte de las 40 galerías que participan en esta nueva cooperación en el marco de Art Cologne proviene del extranjero. La renta de espacio en un ambiente exclusivo pero a bajo precio, entre 3.000 y 5.000 euros, ha animado a muchos a participar.
¿Interés en un Matisse?
Habrá que ver si las reformas implementadas por el director de arte son suficientes para dar un nuevo impulso a la Art Cologne y sirven para incrementar el atractivo de esta sede para las galerías internacionales, que por lo demás no están del todo ausentes. Los 70.000 visitantes esperados podrían admirar, por ejemplo, un cuadro de Henri Matisse que presente la galerista londinense Anelly Juda y que ofrece por 4,25 millones de euros. La galería Gmurzynska, otra de las grandes en el comercio internacional del arte, presentará durante los cinco días que dura la feria un cuadro de Joan Miró, que se pude adquirir por un módico millón de dólares.