McCain también tiene vice: una joven mujer

Con es la primera mujer que aspira a la vicepresidencia por los republicanos y la segunda que aspira a ese cargo en la historia del país. Con 44 años, la gobernadora compensa los 72 años de McCain, que éste cumplió precisamente hoy. Y con dos años en el cargo y tres senadores en las principales candidaturas de ambos grandes partidos, Palin es la única con experiencia en el ejecutivo.

Por lo pronto, el ex prisionero de Vietnam ya logró con su anuncio un objetivo importante: diluir los ecos del histórico discurso que Barack Obama pronunció al aceptar la candidatura demócrata apenas doce horas antes, en una apoteósica fiesta ante 75.000 personas en Denver.

"Ella es exactamente lo que yo necesito y lo que Estados Unidos necesita", dijo McCain al presentar a Sarah Palin en un acto electoral en Dayton, Ohio. "Me ayudará a sacudir Washington", agregó en una clara referencia a que Obama, que hizo del "cambio" su lema, escogió en Joe Biden a un candidato a vicepresidente que lleva 34 años en el Senado.

Con nervios en el podio

Palin, que apareció en el escenario con su marido y cuatro de sus cinco hijos, llegó con ciertos nervios al podio, pero McCain la tranquilizó: "Sin prisa", le susurró mientras el público la recibía con un gran aplauso.

De "gran desafío" calificó Palin su nueva responsabilidad, que confesó que llegó también para ella de manera "inesperada". Entre alabanzas a McCain, llamados a la integridad de los políticos y recordando que su hijo mayor se alistó en el Ejército y será destinado a Irak en septiembre, Palin aprovechó su primera aparición para apelar directamente a los seguidores de Hillary Clinton, la gran derrotada en las primarias demócratas, que jugó la carta de ser la primera mujer aspirante a la presidencia.

"Las mujeres de Estados Unidos no están acabadas", exclamó, y recordó la ya mítica frase de los "18 millones de grietas en el techo de cristal" con que la senadora por Nueva York calificó a sus votos en las primarias.

"Juntos podemos reventar ese techo de cristal de una vez por todas", agregó en medio de una estruendosa ovación y de la exhibición de algunos carteles con el lema "Seguidores de Hillary apoyan a McCain".

Mensaje para Obama

No es el único mensaje que McCain envía con la elección de Palin al potencial electorado de Obama. El senador por Arizona escogió a la gobernadora del Estado más alejado de Washington, mientras que Obama, que hizo del "cambio en Washington" su lema, eligió con Joe Biden a un senador que lleva desde 1972 en los pasillos de la capital.

La decisión del veterano senador por Arizona fue toda una sorpresa hasta en los más altos círculos del Partido Republicano, donde se esperaba el nombramiento del joven gobernador de Minnesota, Tim Pawlenty, o del experimentado ex gobernador de Massachussets Mitt Romney.

Karl Rove, el "gurú" de los triunfos electorales de George W. Bush, confesó que no tenía en su radar a la gobernadora de Alaska. Incluso en la campaña de McCain la noticia pareció causar cierto impacto.

Los primeros análisis sobre la elección de una mujer con fama de íntegra, dura y muy conservadora, fueron encontrados. El propio Rove aseguró en "Fox News" que la elección era un acierto desde el punto de vista de las mujeres, que siempre acuden a votar en mayor número que los hombres.

"Pero no estoy tan seguro del asunto con la edad. No sé cómo se puede criticar a uno (Obama) por su falta de experiencia y elegir a otro que es aún más joven y con menos de un periodo como gobernadora", agregó.

El anuncio de McCain llega sólo unos días antes de que el lunes arranque en las "ciudades gemelas" de Minneapolis/Saint Paul la convención republicana, que se extenderá hasta el jueves y en la que McCain y Palin serán confirmados oficialmente como los candidatos para las elecciones del 4 de noviembre. La gobernadora de Alaska se dirigirá a la convención el miércoles.

Lea en la segunda parte un perfil biográfico de Sarah Palin.

Perfil de Sarah Palin

Las elecciones de 2006 fueron un desastre para los republicanos, que perdieron la mayoría en el Congreso y no arrebataron ningún escaño ni estado a los demócratas. En medio del pesimismo y la decepción, pocos se dieron cuenta de que en las lejanas nieves de Alaska había nacido una estrella.

Sarah Palin, de 42 años y elegida hoy por John McCain como su candidata a la vicepresidencia de Estados Unidos, se convirtió entonces en la gobernadora del estado más septentrional del país, sustituyendo a otro republicano, Frank Murkowski, al que derrotó en las primarias.

Dos años después, Palin es la gobernadora más apreciada valorada por sus conciudadanos en todo el país, con tasas de aprobación cercanas al 90 por ciento. Su ascenso a la fama y su popularidad se basaron en su constante defensa de la honradez en la política.

Palin predicó con el ejemplo: dimitió como presidenta de la poderosa Comisión de Petróleo y Gas de Alaska por las irregularidades de uno de sus miembros, un republicano como ella. Su partido le dio la espalda, pero unos meses después se confirmó que tenía razón, y su imagen de integridad recibió un imparable impulso.

Control completo sobre el partido

Una vez que llegó al poder, Palin se hizo poco a poco con el control completo del partido en su área. Los medios del estado hablan del "recuento de cadáveres" de la gobernadora entre sus correligionarios.

Entre sus primeras medidas estuvo deshacerse del jet que utilizaba su predecesor para desplazarse por el enorme estado. Para delicia de sus votantes, la gobernadora comenzó a tomar vuelos comerciales o incluso conducir ella misma su todo terreno o su modesto Volkswagen Jetta.

Casada y madre de cinco hijos, su marido es un nativo esquimal. Estudió periodismo en la Universidad de Idaho, su Estado natal, gracias a la beca que ganó al quedar segunda en el concurso de Miss Alaska en 1984. Sin embargo, apenas trabajó como periodista en medios locales de Alaska antes de dedicarse a la política, primero como concejal de la localidad de Wasilla (unos 5.000 habitantes) y después como su alcaldesa durante dos mandatos.

No le tiembla el pulso

Palin está considerada una fuerte conservadora a la que no le tiembla el pulso. Según el diario "Anchorage Daily News", este año vetó el 13 por ciento de las leyes de presupuesto que el legislativo del Estado envió a su escritorio.

La gobernadora posee además otras dos credenciales vitales para los conservadores del país: es miembro de la influyente Asociación Nacional del Rifle (NRA) y es una convencida detractora del aborto, como demostró con su propia familia: su quinto hijo, nacido hace poco más de cuatro meses, tiene síndrome de Down, pero cuando Palin lo supo durante la gestación rechazó interrumpirla voluntariamente.