Manifestaciones contra Japón
18 de septiembre de 2012Decenas de miles de personas volvieron a participar hoy en manifestaciones antijaponesas en numerosas ciudades chinas, coincidiendo con el aniversario del controvertido incidente de Mukden del 18 de septiembre de 1931 que Japón utilizó como excusa para invadir Manchuria, en el noreste de China.
Las protestas se celebraron en Pekín y en ciudades como Guangzhou, Changsha, Chongqing, Wenzhou, Harbin o Shenyang.
Un gran despliegue policial y de fuerzas paramilitares vigiló el transcurso de las protestas, en general bien organizadas, que siguen a las de los últimos días en el marco de la disputa entre China y Japón por un grupo de islas en el Mar de la China Oriental -las islas Diaoyu para China y Senkaku para Japón- que escaló en los últimos días, después de que Tokio las comprara.
Los dos países se disputan el archipiélago deshabitado desde hace décadas, debido a su importancia estratégica por sus reservas pesqueras y de crudo y gas.
En Pekín se manifestaron miles de personas ante la embajada nipona, en una marcha que parecía bien organizada y vigilada por un gran despliegue de la policía. Los manifestantes gritaban pidiendo el boicot de bienes japoneses. Los manifestantes lanzaron botellas de plástico, tomates y huevos contra el recinto diplomático, mientras la policía llamaba con megáfonos al civismo.
"Las islas Diaoyu pertenecen a China" o "No olviden nuestra humillación nacional", se leía en pancartas y algunos llevaban consigo fotos de Mao Zedong. Algunas pancartas llamaban incluso a la guerra contra Japón.
El partido gobernante en China considera el siglo XIX y la primera mitad del XX como un periodo de humillación nacional por parte de Japón. Hoy se recuerda el 71 aniversario del incidente de Mukden o incidente de Manchuria, producido cuando una parte del ferrocarril de la región fue dinamitado, lo que sirvió de excusa para la invasión japonesa.
Ante la nueva ola de protestas, el primer ministro nipón, Yoshihiko Noda, elevó la alerta en su embajada en Pekín y sus consulados en otras ciudades chinas. Además pidió a las autoridades chinas que procuren seguridad a los ciudadanos japoneses.
Grandes empresas japonesas cerraron por motivos de seguridad sus fábricas en China. Fabricantes de electrónica como Sony, Mitsubishi Electric o de automóviles como Honda, Toyota, Suzuki o Nissan enviaron a sus trabajadores chinos dos días a casa. Según informaciones de prensa, algunos comerciantes de coches japoneses tuvieron que recibir protección policial después de que el fin de semana se produjeran saqueos y disturbios. También algunas cadenas comerciales japonesas cerraron sus puertas de forma preventiva.
Fuentes del gobierno japonés señalaron que el gobierno está haciendo lo posible para garantizar la seguridad de sus ciudadanos y de las empresas niponas en China.
En vista de las tensiones, los dos países patrullan las controvertidas aguas. La vigilancia costera japonesa señaló que avistó un barco que acompañaba a un pesquero chino, informó la agencia japonesa Jiji Press y se exigió a la tripulación que no entrara en aguas niponas.
Según las informaciones, una flota de cientos de pesqueros chinos comenzaron la nueva estación de pesca en la zona marina y la vigilancia costera china anunció que protegerá a los pescadores. Hasta el momento no se conocen incidentes. Japón anunció simplemente que patrullará la zona con la mayor atención, dijo un portavoz del gobierno en Tokio.
Y ante el trasfondo de las tensiones, el secretario de Defensa estadounidense, Leon Panetta, comenzó hoy conversaciones políticas en el marco de una visita de tres días a China. Panetta llegó la noche del lunes al país procedente de Japón, donde hizo un llamamiento a la contención y a una solución pacífica del conflicto.
Fuente: DPA
Editor: Enrique López