En la comunidad judía de Argentina, la mayor de Latinoamérica, muchos temen por su seguridad tras los ataques de Hamas en Israel: hay colegios que ya no exigen uniforme a sus alumnos para evitar que sean identificados en la calle, chicos que se cubren la kipá o ya no llevan collares con la estrella de David. Una escuela recibió un piedrazo y también se reforzó la seguridad en templos y clubes.