¿Banco para migrantes?

Con la venta de 572 créditos al consumo por un valor de 5,5 millones de euros al Banco Pichincha, el primero de Ecuador, el grupo Bankia (Caja Madrid) ha comenzado a sanear sus balances. “Se ve que el banco español quiere reducir su compromiso para no tener que mantener una base demasiado alta de capital que por supuesto cuesta mucho dinero y esa es la motivación del banco al vender esa cartera”, afirma el investigador y catedrático del Instituto de Investigación económica de la Universidad de Kiel, Federico Foders, en conversación con Deutsche Welle.

“Algunos bancos españoles, en particular Bankia, tienen un problema con carteras que yo no diría que son de alto riesgo, pero tampoco son de bajo riesgo, porque según el reglamento nuevo, el No. 3 de Basilea, todos los bancos tienen que mantener su base de capital de acuerdo a los riesgos de la cartera de crédito", afirma el experto.

Medio millón de clientes

Según reportó el diario El País en días pasados, unos 500 clientes que contrataron créditos con Caja Madrid, ahora Bankia, recibieron una carta en la que se les informaba que el Banco Pichincha S.A. había adquirido la totalidad del crédito suscrito y por ello es ahora la entidad legítima acreedora.

Después de abrir una sucursal en Madrid hace menos de un año, Pichincha “está comprando créditos en España, tanto al consumo como hipotecarios, como estrategia para aumentar su cartera de clientes entre la comunidad inmigrante”, afirma el diario madrileño.

“Los inmigrantes, particularmente aquellos provenientes de Latinoamérica, son un grupo muy interesante para las instituciones financieras”, afirma Foders. El experto señala que tan sólo el año pasado América Latina recibió unos 70.000 millones de dólares por concepto de remesas, una cantidad equivalente al monto de inversiones directas en la región y cien veces más alta que la cantidad que recibe la región por concepto de ayuda al desarrollo.

No es una empresa caritativa

Foders destaca la importancia que tienen los emigrantes para la banca, especialmente para las entidades latinoamericanas. Se estima que unos 600.000 inmigrantes ecuatorianos viven en España. “Ya sea que el inmigrante ecuatoriano quiera comprar una casa en España, invertir o contratar un crédito de consumo para comprarse un automóvil, esa persona también manda dinero a sus familiares en el Ecuador y qué mejor que hacerlo a través de un banco ecuatoriano", afirma el investigador, que reconoce que no se trata de una empresa caritativa, el banco es una empresa comercial que busca hacer un beneficio, pero añade que los clientes estarán contentos si reciben un buen servicio.

En 1999 y en medio de una grave crisis económica, Banco Pichincha incursionó en el área de microfinanzas creando una subsidiaria, CREDIFE, para otorgar microcréditos. Los negocios con sus clientes más pobres representaban al poco tiempo un 8% de sus beneficios.

Foders destaca la enorme contribución que aportan los emigrantes a sus países de origen. “España está pasando por un momento muy difícil y los primeros que pierden el empleo son los inmigrantes y las personas de baja escolaridad, pero en unos dos años más España tal vez recupere la fuerza que atrajo a tantos latinoamericanos”, concluye.

Autora: Eva Usi

Editora: Emilia Rojas