Las momias más conocidas del mundo y su historia
Cadáveres conservados en pantanos, faraones egipcios, guerreros mongolos... el origen y la causa de muerte de las momias de todo el mundo son objeto de la fascinación humana.
Tutankamón
En 1922, el egiptólogo británico Howard Carter descubrió en el Valle de los Reyes la momia del Faraón Tutankamón, en una tumba saqueada casi por completo. Durante décadas, los investigadores especularon sobre su posible asesinato, hasta que en 2005 un tomógrafo computerizado permitió probar que Tutankamón murió como consecuencia de un accidente de caza.
Ata
¿Un ser extraterrestre? Esta es la pregunta que se hacían muchos cuando se encontró este esqueleto en el desierto de Atacama, en Chile, en 2001. Se dedicó hasta un documental a investigar su posible origen no humano. La ciencia acaba de demostrar, sin embargo, que este cuerpecito de 15 centímetros fue el de una niña nacida prematuramente con numerosas mutaciones.
Rosalía Lombardo
Durante casi un siglo, Rosalía yació en una cripta de Palermo (Italia). La pequeña murió poco antes de su segundo cumpleaños, víctima de la gripe española. Parece como si solo estuviera durmiento y es considerada la momia más hermosa del mundo. Los investigadores descubrieron que el embalsamador utilizó formaldehído para este propósito.
Miles de momias a disposición del turista
En Palermo no solo está la momia más hermosa del mundo, sino también algo escalofriante: las Catacumbas de los Capuchinos contienen alrededor de 8.000 momias aún vestidas con sus antiguas ropas: sacerdotes, niños, vírgenes, monjes, profesionales... El lugar se ha convertido en una verdadera atracción turística.
Ötzi
En 1991, un matrimonio de Núremberg descubrió una momia en un glaciar durante un paseo en los Alpes de Ötztal, de ahí su nombre. Los investigadores han determinado que el hombre, nacido entre los años 3.359 y 3.105 antes de Cristo, murió al ser atacado con una flecha.
Guerreros escitas
En 2003, un equipo internacional de científicos descubrió en Mongolia a los guerreros escitas, aproximadamente la mitad de antiguos que Ötzi. Este pueblo indeoeuropeo de jinetes habitaba las estepas de Eurasia. Conservada gracias al hielo, esta momia estaba vestida con una piel de marmota.
Franz el Pelirrojo
El conocido como Hombre de Neuversen fue descubierto en 1900 en una turbera del lago Bourtange Moor, en Baja Sajonia, Alemania. Solo en este estado se han descubierto 60 cuerpos similares. A lo largo de 1.700 años, los componentes naturales del pantano tiñeron su pelo de rojo, por lo que también se le llama Franz el Pelirrojo. El ácido húmico del pantano permitió la conservación del cuerpo.
El Niño de Detmold
Esta momia bebé viene de Perú, pero toma su nombre del museo en el que se encuentra, el Lippisches Landesmuseum Detmold, en el estado alemán de Renania del Norte-Westfalia. El pequeño murió por un defecto cardíaco y actualmente es una de las momias más antiguas del mundo: con 6.500 años de antigüedad es incluso más longevo que Tutankamón y Ötzi.