Polonia: alianza de partidos para vencer al gobernante PiS
10 de octubre de 2023Dos polacas de dos agrupaciones políticas afines reparten folletos en la plaza Wilson, al norte de Varsovia, capital de Polonia. A pocos días de las elecciones parlamentarias, su intención es captar el voto de los indecisos. Se trata de Anna Radwan-Röhrenschef, que apoya la alianza tripartita electoral Tercera Vía (TD, por sus siglas en polaco), y Katarzyna Piekarska, que hace campaña por la Plataforma Cívica (PO, por sus siglas en polaco) del líder de la oposición, Donald Tusk.
Ellas trabajan juntas para evitar un nuevo gobierno del euroescéptico y antiliberal Partido Ley y Justicia (PiS, por sus siglas en polaco), liderado por el populista de derecha Jaroslaw Kaczynski.
¿Tercera Vía o tercera victoria de Kaczynski?
El copresidente de la TD, Wladyslaw Kosiniak-Kamysz, ha acuñado la frase: "O Tercera Vía entra en el Parlamento o el PiS de Kaczynski tiene un tercer mandato en el bolsillo".
"Comparto plenamente esta valoración. Tenemos un gran programa", señala Radwan-Röhrenschef. El problema de la alianza, que incluye al partido de agricultores PSL y al nuevo partido Polonia 2050, es que se diferencia poco programáticamente de la PO, de Tusk.
Pero la TD no tiene asegurada su entrada en el Parlamento. La agrupación necesita al menos el 8% de los votos. En las encuestas a veces está por encima, a veces por debajo. Si la alianza no supera esa barrera, las posibilidades de que el PiS obtenga un tercer mandato aumentan.
Tusk necesita dos socios de coalición
Los resultados electorales de los partidos más pequeños decidirán quién formará gobierno después del 15 de octubre de 2023. La opositora PO, que en estas elecciones se presenta junto a dos grupos más pequeños, solo podrá derrotar al PiS si la TD y Nueva Izquierda logran un buen resultado.
Según los sondeos, PO obtendría un 30%; menos que el PiS, que puede aspirar a entre un 34 y un 37% de los votos. Solo si la TD y la Nueva Izquierda obtienen alrededor del 10% cada una, la oposición liberal-conservadora en su conjunto podrá obtener los 231 mandatos necesarios en el Parlamento de 460 escaños.
Al principio, Donald Tusk veía a la TD como una competidora molesta, que podía restarle votos. Pero luego comprendió que un buen resultado de esta agrupación es importante. En la Marcha del Millón de Corazones, celebrada en Varsovia el 1 de octubre de 2023, pidió a quienes no quisieran apoyarle que votaran a la TD.
"No vemos a la TD como una competencia, sino como un socio con el que gobernaremos juntos", aseguró la diputada de la PO Piekarska, que busca la reelección, y que intercambió folletos con Radwan-Röhrenschef en la plaza Wilson.
La izquierda quiere gobernar con Tusk
El resultado de Nueva Izquierda también es importante en esta elección. Durante la marcha antes mencionada, uno de sus líderes, Wlodzimierz Czarzasty, dijo que su partido estaba dispuesto a aliarse con la PO. Con sus críticas radicales a la Iglesia Católica y sus planes para ampliar la ley del aborto, Nueva Izquierda se dirige a los votantes para los que Tusk es demasiado conservador y, por tanto, no elegible.
Pero el líder del PiS, Kaczynski, también necesita un socio para conservar el poder. El único posible es la Konfederacja Wolnosc i Niepodleglosc (Confederación de la Libertad y la Independencia), un partido nacionalista-libertario con representación en el Parlamento, liderado ahora por el empresario de 36 años Slawomir Mentzen, quien ha sido criticado por no querer "ni judíos, ni homosexuales, ni aborto, ni impuestos, ni Unión Europea".
La Confederación, que no se cierra a una alianza con el PiS, quiere recortar drásticamente las prestaciones sociales y abolir el seguro de pensiones. También sigue una línea nacionalista anti-ucraniana.
(ju/ers)