La Unión Europea e Irlanda: conceder para convencer
11 de diciembre de 2008
Las decisiones definitivas podrían producirse durante la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, que se celebra desde este jueves en la ciudad de Bruselas.
Las metas de Sarkozy, en su calidad de presidente pro tempore del bloque comunitario, son presentar resultados concretos en tres áreas específicas: la coyuntura económica, la protección del clima, y las reformas a las instituciones europeas contenidas en el Tratado de Lisboa.
“Es quizá la cumbre más importante de los últimos años. Por lo menos es el encuentro más relevante en que participo desde que soy presidente de la Comisión Europea. Será toda una prueba para Europa”, dice José Manuel Durao Barroso.
La crisis, prioridad
El reto más urgente consiste en las sombrías perspectivas para la economía europea para el año próximo, debido a la crisis financiera internacional. Los mandatarios analizarán un paquete financiero presentado por la Comisión Europea, por un total de 200.000 millones de euros. Ahí se incluyen los programas a nivel nacional.
Alemania aportará 32.000 millones de euros, Francia, 26.000 millones. La canciller Angela Merkel ha recibido críticas por oponerse a que la aportación alemana crezca. Recientemente se llevó a cabo una reunión en la que participaron tanto Sarkozy como Barroso y el primer ministro británico, Gordon Brown, sin la presencia de Merkel.
El presidente francés descarta que se trate de un desacuerdo mayor. “Nosotros evaluamos la situación al igual que la señora Merkel; no hay discrepancia. ¿Dónde radican los puntos de vista comunes? Primero, en que la crisis es grave. Y luego, en considerar prioritario revivir la economía, como lo han demostrado las medidas más recientes que ella ha adoptado”, señaló Sarkozy.
El clima, asunto difícil
Más complejo será lograr acuerdos en cuanto a las metas europeas para proteger el clima. En principio, las emisiones de dióxido de carbono deben reducirse 20 por ciento mientras que la eficiencia energética debe aumentar en el mismo porcentaje. Pero hay países como Polonia que demandan cláusulas de excepción, pues aún obtienen más del 90 por ciento de su energía eléctrica a partir del carbón.
¿Habrá tratado europeo en 2009?
El otro aspecto importante, en el cual parece haber cambios repentinos, es el de las reformas a las instituciones europeas. Se da por descontado que el gobierno irlandés convocará en 2009 a un segundo referéndum sobre el Tratado de Lisboa. Irlanda exige contar con un miembro permanente dentro de la Comisión Europea.
“No es la solución ideal que propone el Tratado de Lisboa, pero el documento tampoco cierra las puertas a esa medida. Mi opinión es que, si para los irlandeses es tan importante, debe otorgársele esa concesión”, dice Barroso.
Se trataría a todas luces de una solución de emergencia. Pero Sarkozy está decidido a alcanzar resultados concretos en los tres ejes temáticos. Incluso, según se dice en Bruselas, podría prolongar la cumbre hasta el sábado con tal de lograr tales objetivos.