La NSA instaló programas espía en determinados ordenadores
30 de diciembre de 2013
La Agencia Nacional de Seguridad (NSA) de Estados Unidos instaló programas espía en ordenadores de personas concretas, de acuerdo a informaciones que publica este lunes (30.12.2013) la revista alemana Der Spiegel. Para ello pusieron en su punto de mira a productos de empresas estadounidenses como Cisco o Dell. De momento se desconoce cómo y contra quién se usaron estos dispositivos de espionaje a distancia.
Los servicios secretos estadounidenses desarrollaron una técnica para capturar el tráfico de datos y crearon un código adicional para ello. El sistema fue denominado por el informante Edward Snowden con el nombre de “Quantum”. La publicación alemana publicó además un catálogo interno de la NSA sobre tecnología de espionaje. Allí se puede ver, por ejemplo, un cable para monitor por 30 dólares con el que se puede leer el contenido de una pantalla a distancia a través de un radar, o una estación base por un valor de 40.000 dólares que se emplea como torre de comunicaciones y sirve para poder interceptar llamadas de móviles.
Peor que una pesadilla
“Estas posibilidades son peores que las peores pesadillas”, declaró Jacob Appelbaum, que ayudó a analizar los documentos para la publicación alemana. A pesar del enorme catálogo de la NSA permanecen aún sin esclarecerse cuestiones como con qué frecuencia y cuándo se aplicó esta tecnología.
“Sabemos que la utilizaron cuando la NSA quería espiar a una persona concreta”, indicó Appelbaum. “Sin embargo, se decidió no publicar los nombres de las víctimas”, agregó. En su búsqueda de puntos de acceso a las comunicaciones, la NSA puso en el punto de mira a productos de empresas estadounidenses.
En los documentos publicados por Der Spiegel, aparecen los nombres de empresas como Microsoft, Dell o Cisco, servidores de internet como Yahoo y redes sociales como LinkedIn y Facebook. Sin embargo, no está claro qué empresas fueron víctimas de los servicios secretos y quienes pudieron ayudar en los ataques. “No trabajamos con ningún gobierno para debilitar nuestros productos o instalar las conocidas como puertas traseras de seguridad”, se defendió enseguida Cisco. (dpa)