Marihuana en la encrucijada

DW: ¿Qué beneficios para la sociedad esperan obtener las autoridades de Uruguay de la liberalización de la producción y el comercio de marihuana?

Dra. Galzerano: La liberalización de la producción y el comercio de marihuana permitiría disminuir el efecto góndola (es decir, cuando un usuario de marihuana va en busca de la droga y al no encontrarla le ofrecen pasta base, n. de la R.) a través de la separación del mercado de cannabis del de las otras drogas, como PBC (cocaína no tratada, extraída de las hojas de coca a través de un proceso de maceración y mezcla con solventes tales como parafina, bencina, éter, ácido sulfúrico, etc., n. de la R.) o cocaína. Como la venta de cannabis permite obtener nuevos recursos fiscales, con la recaudación de esos impuestos se puede cubrir los costos que genera la asistencia de pacientes adictos y expandir las acciones de prevención y tratamiento de los consumidores de drogas ilegales.

¿Cuáles son las formas de obtener permiso para la producción y el uso personal de marihuana y el cultivo doméstico?

Para el cultivo doméstico estarán autorizadas hasta seis plantas por vivienda; el producto no puede superar los 480 gramos anuales. Cultivar podrán mayores de 18 años, capaces, ciudadanos naturales o legales o con residencia permanente en el país. Una persona solo podrá ser titular de un cultivo doméstico. Los clubes de cultivo deberán ser asociaciones civiles con personería jurídica, con un mínimo de 15 y un máximo de 45 socios, los miembros deberán ser personas capaces, mayores de edad, ciudadanos legales o naturales o con residencia permanente en el país. Podrán plantar hasta 99 plantas en total. La producción y el acopio no deberán superar los 480 gramos por persona.

¿Cuándo comienza a venderse cannabis en farmacias?
Todavía no se sabe cuándo empieza la venta de cannabis para uso recreativo en las farmacias. Se suponía que iba a empezar el año pasado. No hay, sin embargo, aún una fecha concreta. Demorada está también la venta de cannabis para uso medicinal. Lo que sí ya está funcionando son el cultivo doméstico y los clubes de cannabis.

Con la legalización de la marihuana, existe la posibilidad de que Uruguay atraiga a “drogoturistas” de países vecinos. ¿Cómo se piensa controlar ese problema, si se generara?

Los turistas no pueden acceder a ninguna de las posibilidades. Igualmente, algunas personas ofrecieron "catas" de cannabis, pero el Instituto de Regulación y Control del Cannabis (IRCCA) resolvió aclarar que no estaban permitidas.

Un turista no puede comprar cannabis. Eso no excluye, sin embargo, que un uruguayo, que en realidad no consume, compre marihuana y se la venda a algún turista por el doble…
Todo puede pasar, pero pienso que el IRCCA lo va a tener en cuenta.

Se afirma que la legalización de la marihuana termina con el mercado negro. ¿No puede ser la marihuana la droga de entrada para otras drogas más potentes y con las que se puede ganar mucho más dinero en el mercado negro?

En estos casos no se puede generalizar, los perfiles de consumidores son diferentes. No porque consuman cannabis van a consumir PBC o cocaína. Tenemos que trabajar sobre los factores de riesgo para consumir sustancias y sobre los factores de prevención. De cualquier manera, también queda una zona donde puede actuar el mercado negro, que es la de los menores de 18 años. Otro eventual problema que puede surgir es usen el mercado negro los que busquen cannabis con altas concentraciones de THC [el tetrahidrocannabinol (THC) es el principal constituyente psicoactivo del cannabis, n. de la R.], ya que la que se plantea vender va a tener concentraciones medias bajas.

¿Existen pruebas médicas de que el cannabis despierta la necesidad de consumir drogas más potentes? ¿Hasta qué punto eso se tiene en cuenta?

No existen pruebas médicas (que yo conozca) de que el cannabis sea un trampolín hacia otras drogas; existen, como mencionamos, factores de prevención y factores de riesgo.

La legalización de la marihuana puede quitar presión sobre los juzgados y las cárceles. La mayoría de los condenados generalmente no son narcotraficantes, sino consumidores. ¿Ha sido ese aspecto también relevante en Uruguay en relación con la liberalización? 

Antes de la ley había presos por tener cannabis para su uso personal, y la discusión de cuánto era para eso, dependía del juez que actuaba en la causa. A partir de ponerse en marcha la ley, esto se flexibilizó y ya no es así.

La ilegalidad de las drogas socava las posibilidades del control de calidad, lo que genera problemas sanitarios complementarios. ¿Esperan las autoridades uruguayas una mejora en la situación sanitaria en relación con la drogodependencia o el consumo de drogas en general?

La ilegalidad hace que los controles no se realicen y eso conlleva riesgos sanitarios. En realidad, esta medida tiene que ver solo con respecto al cannabis, no con el consumo de drogas en general. Es decir, se va a consumir cannabis, sabiendo sus componentes y su calidad.

¿Será la liberalización de la producción, el comercio y el consumo de marihuana acompañada de medidas o campañas de esclarecimiento sanitario acerca de los riesgos que genera su consumo?

En la ley, en su artículo 1, ya se menciona la prevención. Desde el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) se plantea darle más énfasis: prevención del inicio del consumo, retardo de la edad de inicio (prevención primaria), promover y ayudar al abandono del consumo (prevención secundaria) y tratamiento y rehabilitación de consumidores problemáticos (prevención terciaria).

La Dra. Julia Galzerano es médica especializada en VIH y adicciones. Integra la Comisión de Estudio de la Regulación del Cannabis, creada por el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) para analizar los alcances y las consecuencias de la ley.