La cara oculta de la Eurocopa
14 de junio de 2016La selección de Rusia, país anfitrión del próximo Mundial en el 2018, ha sido advertida de que será expulsada de la Eurocopa Francia 2016 en caso de repetirse las escenas de violencia que sus seguidores protagonizaron en el partido contra Inglaterra en el estadio de Marsella.
Lo curioso es que el comportamiento de los hinchas rusos que ha dado lugar a tan drástica reacción disciplinaria se conoció públicamente a través de fuentes secundarias. Las cámaras que transmitían el partido en vivo simplemente ignoraron lo ocurrido y se concentraron en lo que sucedía en la cancha, mientras en las tribunas reinaba el caos y el miedo. La Eurocopa, exhibida de esta manera, se vio como un pacífico espectáculo futbolístico que, como se supo a través de fotos posteriores, no era en ese momento.
La UEFA decide qué se muestra
En Francia 2016, como en casi todos los grandes eventos deportivos, el organizador pone a disposición de las grandes cadenas internacionales la señal de televisión que ve la audiencia internacional. Así, por disposición de la UEFA, en la Eurocopa no se deben mostrar escenas de violencia. La decisión se justifica con el argumento de no querer incentivar con difusión y publicidad a aquellos que quizás en busca de fama pasajera desean imitar esos comportamientos.
Este manejo, calificado en Alemania como una “censura indirecta”, ha sido duramente criticado por los canales públicos ARD y ZDF, dueños de los derechos de televisión de la Eurocopa. Dieter Gruschwitz, jefe de deportes de ZDF, dijo a la agencia dpa: “Dada la particular situación social en la que se desarrolla el evento, naturalmente esperamos que la señal que recibimos de la UEFA entregue todas las imágenes relevantes sobre lo que sucede en la cancha y sus alrededores. Nosotros ya comunicamos nuestra posición al respecto”.
La audiencia alemana se enteró de los actos violentos en el estadio de Marsella a través del narrador de televisión Oliver Schmidt. Al mejor estilo de los reportajes radiales, Schmidt describió el caos en la tribuna acompañado de imágenes suministradas por la UEFA que nada tenían que ver con su relato porque las cámaras de la transmisión oficial miraron en una dirección diferente.
¿Violencia invisible?
Pese a la política de la UEFA de no darle espacio en sus transmisiones internacionales a los comportamientos desbordados de algunos aficionados, tampoco es que la violencia en los estadios de la Eurocopa Francia 2016 se vuelva invisible para los espectadores alrededor del mundo.
Las cadenas de televisión, según sus acuerdos de transmisión, tienen la posibilidad de colocar hasta 10 cámaras propias en los estadios. En la práctica, sin embargo, este recurso es poco utilizado pues cuando se reciben imágenes de los partidos suministradas por la UEFA, los equipos propios le dan prioridad a la realización de entrevistas y la producción de análisis del juego.
En Alemania, por ejemplo, se informó prolíficamente acerca de los enfrentamientos entre hinchas rusos e ingleses fuera del estadio, y también se captaron imágenes de lo acontecido adentro, aunque estas no fueron presentadas en vivo, pues las obtuvo un equipo periodístico de la ARD mientras el partido en Marsella era transmitido por los colegas del canal ZDF. Aún así, el público alemán ha podido seguir muy de cerca la escalada de violencia de los hooligans, incluidos los propios.
En Lille, antes del partido entre Alemania y Ucrania, un grupo de aproximadamente 50 seguidores de la selección campeona del mundo también protagonizó trifulcas y hechos bochornosos, entre ellos la exhibición de símbolos neonazis en la plaza central de la población francesa. Los medios de comunicación alemanes han informado al respecto, dejando al descubierto la cara oculta de la Eurocopa que oficialmente la UEFA no muestra.