La Bundesliga empieza sin policías
16 de agosto de 2014
El programa piloto de disminución de la fuerza policial en el fútbol alemán es una idea del Ministerio del Interior del estado federal de Renania del Norte-Westfalia, donde tienen su sede seis equipos de la Bundesliga (Dortmund, Schalke, Colonia, Paderborn, Gladbach y Leverkusen), y dos de la categoría de ascenso (Düsseldorf y Bochum). Allí será donde el experimento se pondrá a prueba durante los primeras cuatro fechas del campeonato.
Conflicto financiero
Empezar el campeonato del fútbol profesional sin policía no se puede interpretar como un reflejo de cuán vanguardista es Alemania en materia de seguridad en los estadios y sus zonas aledañas. Por el contrario, la medida simboliza un viejo problema y se convierte en una nueva ronda en la pelea entre los clubes de la Bundesliga y el Estado en torno a la financiación de los altos costos que genera garantizar un evento deportivo pacífico y tranquilo con la presencia de las fuerzas del orden.
Hasta ahora los clubes de la Bundesliga no aportan dinero adicional para que la policía se haga presente en los partidos de fútbol, ni participa en los costos adicionales que genera duplicar, triplicar o cuadriplicar (según el nivel de riesgo de cada juego) el personal policial como sí deben hacerlo todos los demás organizadores de eventos públicos con ánimo de lucro en Alemania.
Recientemente, Bremen perdió la sede de un partido de la selección campeona del mundo, el del 14 de noviembre contra Gibraltar en la eliminatoria a la Eurocopa 2016, tras haber anunciado que extendería a la DFB (Federación Alemana de Fútbol) una factura cobrando parcialmente los servicios de la Policía. Ahora el juego se escenificará en el estadio de Núremberg, donde los agentes trabajarán pagados completamente por el erario público.
Mayor responsabilidad propia
El Ministro del Interior de Renania del Norte-Westfalia, Ralf Jäger, advirtió que debido a las medidas de ahorro en el gasto público es necesario reducir los costos que genera el uso de la policía en los 231 partidos de fútbol profesional (de la primera a la tercera división) que esta temporada se jugarán en su Estado.
“En los enfrentamientos que en el pasado han demostrado ser pacíficos y tranquilos habrá menos efectivos de la policía en el estadio, en algunos casos incluso ninguno, aunque en los partidos considerados de alto riesgo la cantidad de agentes será la misma que en el pasado”, reveló Jäger. Esto significa que ya no habrá policía custodiando las estaciones de trenes, ni acompañando a las aficiones rivales camino al partido para evitar agresiones y que los conflictos escalen, así como cada vez menos en el mismo estadio, donde los policías trabajaban 100.000 de las 300.000 horas de las jornadas laborales que el año anterior le dedicaron al fútbol.
La esperanza es que el público de la Bundesliga se comporte con responsabilidad. En ese sentido la policía apeló públicamente a los espectadores a través de un comunicado en el que sostiene que “la policía de Renania del Norte-Westfalia está segura de que los aficionados actuarán de forma calmada y responsable. Empezamos la temporada depositando nuestra confianza en ustedes, y esperamos poder justificar este gesto con su pacífico comportamiento”.
Los clubes tienen la palabra
Los resultados del programa piloto serán evaluados en la última semana de septiembre. En caso de que las experiencias sean positivas, la policía planea extender la reducción de sus efectivos para el resto de la temporada. Esto dejará en manos de los clubes el trabajo de seguridad en sus estadios, algo que ya ocurre en España e Inglaterra, pues Alemania se resiste a seguir el modelo francés de pagar extra por el trabajo policial.
Andreas Rettig, directivo de la DFL (Liga de Fútbol Alemán), saludó el experimento de Renania del Norte-Westfalia asegurando que “al concepto hay que darle una oportunidad”. El director deportivo del Colonia, por su parte, dijo que “nadie tiene por qué tener miedo de ir al estadio por motivos de seguridad. El hecho de que la policía no esté allí no significa que ha desaparecido y no vaya a presentarse cuando se le necesite”.