La Bundesliga comienza temporada con brío mundialista
11 de agosto de 2006El clásico entre el actual campeón Bayern Múnich y el Borussia Dortmund será el primer partido de una temporada prometedora en cuanto a la asistencia del público a los estadios: 360.000 entradas de abono fueron adquiridas por la afición en la preventa.
La cifra estableció un nuevo record y con excepción del Borussia Dortmund todos los grandes clubes agotaron tempranamente las entradas de abono para sus partidos de la temporada 2006/2007.
El número de nuevos socios de los diferentes clubes también registró un alza significativa; siguiendo los pasos del VfB Stuttgart el Hamburgo SV y el Borussia Mönchengladbach rebasaron la barrera de 30.000 seguidores oficiales. Adicionalmente los equipos recibirán por los derechos de televisión sumas jamás pagadas.
Todo esto a pesar de la ausencia de estrellas como Michael Ballack, Ze Roberto o Jan Köller que optaron por marcharse al extranjero en busca de ligas más lucrativas. ¿Novedades espectaculares? Ninguna, y sin embargo los hinchas abarrotarán los 18 estadios de la primera división alemana.
El principio Klinsmann
La euforia del Mundial está todavía presente y la filosofía del ex-entrenador alemán Jürgen Klinsmann se impone: lo que cuenta es el equipo y no los jugadores individualmente. Lo que se puede lograr con un objetivo claro, sólido compromiso y férreo espíritu de equipo lo demostró el joven seleccionado de Alemania al alcanzar con honores el tercer puesto en el Mundial.
El arquero Jens Lehmann y Michael Ballack son los únicos integrantes de esa selección en el extranjero, todos los demás juegan en la Bundesliga, inclusive el goleador del Mundial Miroslav Klose quien el pasado 9 de agosto fue declarado “Futbolista del Año” por la prensa deportiva alemana.
"La alegría del fútbol"
100 millones de euros invirtieron los 18 equipos de la primera división alemana en sus nominas, un monto que hace muchos años no se alcanzaba en la Bundesliga. Como ejemplo basta citar al Hamburgo SV que en la adquisición de tres nuevos jugadores (Vincent Kompany, Boubacar Sanogo y Paulo Guerrero) se gastó 14,8 millones.
Sin embargo -y pese al aumento de los ingresos en un 42% gracias a la negociación de los derechos de televisión- el campeonato alemán aún no logra alcanzar el nivel de las principales ligas europeas: Inglaterra, España e Italia.
El presidente del Bayern Múnich, Karl-Heinz Rummenigge, incansablemente advierte que los aficionados no solamente se gastan el dinero comprando entradas al estadio para ver a su equipo ganar sino también, especialmente, para ver buen fútbol.
Para ello se espera que la temporada, siguiendo el ejemplo sentado por la selección alemana durante el Mundial, privilegie el juego ofensivo.
“El Bayern Múnich debe ofrecer más diversión” afirmó Rummenigge al tiempo que le exigía al entrenador Felix Magath presentar un equipo con orden y disciplina que también sea capaz de transmitir “la alegría del fútbol”.
El gerente del Stuttgart, Horst Heldt, comparte esa opinión, “jugando un fútbol atractivo se puede entusiasmar a toda la familia para que vaya al estadio”.
Apertura con ambiente mundialista
¿Y además de eso? ¿Una aburrida lucha por el titulo? ¿Un previsible candidato al descenso? Nada de eso.
Los rivales del Bayern Múnich -Werder Bremen, Hamburgo SV y Schalke 04- quieren despojarlo del rol de favorito y hacerse a los trofeos.
El sub-campeón Bremen invirtió 11,7 millones de euro en nuevos jugadores, entre ellos el defensa central del seleccionado alemán y ex-militante en las filas del Hannover 96, Per Mertesacker. “Lo que queremos es salir campeones” dice el gerente del club Klaus Allofs al explicar su política de transferencias.
Aún está por verse que papel cumplirán los recién llegados a la primera división Aachen, Bochum y Cottbus, equipos que podrían despertar el mismo furor que genera el Maguncia 05 también venido de la liga de ascenso.
En el partido de apertura los aficionados no tendrán que prescindir del ambiente mundialista: en el Allianz-Arena este viernes el enfrentamiento entre Bayern Múnich y Borussia Dortmund iniciará bajo los acordes del himno nacional de Alemania.