Una app llama a boicotear productos relacionados con Israel
4 de diciembre de 2023La aplicación parece funcionar de forma muy sencilla: los usuarios pueden escanear el código de barras de un producto o introducir su nombre, y en cuestión de segundos se les informa de hasta qué punto el fabricante "apoya a Israel". A continuación se muestra "No Thanks" (No, gracias), un llamamiento a no comprar determinados productos. Los videos en TikTok y X muestran que aparecen en la lista empresas como Coca-Cola y Nescafé.
La aplicación se lanzó el 13 de noviembre. Hasta ahora se ha descargado más de 100.000 veces y, según los comentarios en las redes sociales, la aplicación interesa a personas de todo el mundo, por ejemplo, de la India o de Bélgica.
La aplicación ya no se puede descargar desde el Playstore
El conflicto entre Israel y Gaza ha escalado desde que el grupo islamista militante Hamás, clasificado como organización terrorista por la Unión Europea, Estados Unidos, Alemania y otros países, atacó Israel el 7 de octubre, asesinando a 1.200 personas y tomando a cerca de 240 como rehenes. Según el Ministerio de Sanidad dirigido por Hamás, casi 15.000 personas han muerto en el lado palestino desde el 7 de octubre como consecuencia de los bombardeos israelíes sobre la zona acordonada de la Franja de Gaza. Desde entonces, muchas personas de todo el mundo se han posicionado a favor de Israel, de Palestin, e incluso de Hamás.
La aplicación ya no puede descargarse de Playstore y, a partir del 1 de diciembre ya no existe una versión para iOS, es decir, dispositivos Apple. Sin embargo, la aplicación aún puede descargarse de forma indirecta.
Pero, ¿quién está detrás de "No Thanks", y cuál es exactamente su objetivo? ¿Y por qué la aplicación ya no está disponible en Playstore?
"Perdí a mi hermano"
Según informa la propia aplicación, Ahmed Bashbash desarrolló "No Thanks". Ahmed Bashbash es un palestino de Gaza que, según esa app, vive actualmente en Hungría. Bashbash escribe a DW que perdió a su hermano "en esta masacre" y que su hermana murió en 2020 porque no recibió ayuda médica de Israel a tiempo. El objetivo del boicot es "evitar que lo que me ocurrió a mí le ocurra a otro palestino".
Recopiló la lista de empresas que supuestamente apoyan a Israel con ayuda de los sitios web "Boycotzionsim" y "Ulastempat". El sitio web "Boycotzionism" se anuncia con el lema "Del río al mar, Palestina será libre", que es interpretado por muchos como antisemita. Algunos ven en la frase un llamamiento contra el derecho de existencia del Estado de Israel.
Las listas de numerosas marcas que deberían ser boicoteadas, según los operadores del sitio web, incluyen empresas mundialmente conocidas como Adidas, McDonald's, Chanel, Netflix y Apple. Las listas incluyen empresas de todo tipo de industrias, desde alimentación a cosméticos o proveedores de streaming. Algunas empresas están en la lista porque lanzaron conjuntamente una campaña tras el 7 de octubre en la que condenaban el ataque terrorista de Hamás contra Israel y se pronunciaban contra toda forma de odio y antisemitismo. Según esas páginas web, otras empresas invierten, por ejemplo, en empresas emergentes israelíes o financian "el robo de territorio palestino".
¿Crítica de las políticas de Israel o antisemitismo?
Bashbash explicó a DW que, según le informaron, Google prohibió la aplicación por incluir la frase: "Aquí puedes ver si el producto que tienes en tus manos apoya la matanza de niños en Palestina". Esa frase aparecía en la pantalla de inicio de la aplicación.
Según los expertos, esta frase puede interpretarse como una crítica a Israel o como antisemita. Existe un mito antisemita de la Edad Media que afirma que los judíos asesinaban a niños para producir pan para la Pascua judía (Pésaj) con su sangre, explica Meron Mendel, director del Centro Educativo Ana Frank, en entrevista con DW. Uffa Jensen, subdirector del Centro de Investigación sobre el Antisemitismo, también afirma que esta expresión podría acercarse a la acusación de antisemitismo porque juega con la imagen de Israel como asesino de niños.
La otra interpretación de la frase es el hecho de que, como sucede, están muriendo niños por los ataques aéreos israelíes en Gaza durante la guerra actual, dice Mendel. Como no están siendo asesinados intencionadamente, sino que están muriendo en el transcurso de la guerra, la frase sobre un producto que apoya el asesinato de niños en Palestina también puede verse como una exageración polémica, "como un medio de 'emocionalizar'", explica la directora del Centro Educativo Ana Frank. Uffa Jensen añade que Hamás mató inicialmente a niños israelíes el 7 de octubre. "Una frase así escapa a este contexto y resulta entonces altamente polémica", prosigue.
¿Cuál es el objetivo del boicot?
Según Mendel, la cuestión importante es cuál es el objetivo exacto del boicot a determinados productos. Desde el 7 de octubre, está claro que no todos persiguen los mismos objetivos: "Hay quienes quieren un Estado palestino junto al Estado israelí, y hay quienes quieren la destrucción del Estado de Israel. De lo que se trata aquí es de distinguir entre estos dos grupos".
"El medio del boicot económico, la decisión individual de no comprar productos, es legítimo en un principio", continúa Mendel. Además, el boicot árabe contra Israel no es nuevo: comenzó a principios de la década de 1970. Según Jensen, también hay una pequeña minoría de judíos de izquierda que critican a Israel y apoyan esas campañas de boicot. El boicot también es propaganda contra Israel. En general, por tanto, es necesario diferenciar si se trata de un llamamiento crítico hacia Israel, o de antisemitismo, dice Mendel.
La comparación con los llamamientos nazis es "problemática"
No pocos usuarios de las redes sociales en Alemania piensan en la propaganda de la Alemania nazi de 1933, "No les compren a los judíos", cuando ven tales llamamientos al boicot. Sin embargo, esta comparación es inadecuada históricamente y problemática en sí misma, ya que encierra el peligro de trivializar al régimen nacionalsocialista. "Implica que había una razón específica por la que los nazis boicoteaban a los judíos, y que los alemanes no judíos y los alemanes judíos eran dos partes en conflicto antes de 1933. Eso es, por supuesto, completamente erróneo desde el punto de vista histórico", explica Mendel.
A Jensen también le parece controvertida la conexión con el régimen nazi: "Internacionalmente, hay docenas de otros ejemplos de medidas de boicot". Menciona, por ejemplo, el boicot a Sudáfrica, durante décadas, hasta los años 90, debido a la segregación racial de entonces. Por un lado, estos llamamientos pueden compararse, pero por otro, también se mezclan contenidos antisemitas en los llamamientos al boicot de Israel.
Daños económicos poco probables
Además, el problema que se le plantearía a Israel como consecuencia de un boicot de este tipo no es el perjuicio económico, sino el boicot cultural y científico que de la mano, explica Mendel. "Las fuerzas progresistas en Israel, en la ciencia, en el arte, en el movimiento pacifista -también en Europa y Norteamérica- están siendo marginadas y excluidas". Esta escalada también se ha logrado, en parte, gracias a este tipo de acciones. Por el contrario, el objetivo general debería ser apoyar a las fuerzas progresistas pacíficas de ambas partes.
Mientras tanto, el primer objetivo de Ahmed Bashbash es que la aplicación vuelva a estar disponible en las tiendas de aplicaciones más populares. La aplicación es gratuita, y todos los beneficios que obtiene con ella se envían a organizaciones palestinas que ayudan a la población de Gaza, según escribe Bashbash en su aplicación.
(gg/cp)