Kosovo festeja aniversario
15 de febrero de 2009Mientras que el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Frank-Walter Steinmeir, hablaba de "un éxito para Europa", su homólogo español, Miguel Ángel Moratinos, lo hacía de "una violación del derecho internacional". La Unión Europea tuvo sus dificultades en asumir la declaración de independencia de Kosovo en febrero de 2008. Un año después 22 de los 27 estados de la UE han reconocido oficialmente a Kosovo.
Más dependiente que nunca
La Unión sigue sintiendo los riesgos y efectos secundarios de la separación de Kosovo de Serbia. No sólo por el hecho de que el país habitado preponderantemente por albaneses logra subsistir sólo gracias a los donativos de sus vecinos ricos. En julio de 2008, 65 naciones prometieron apoyo por un total de mil 200 millones de euros para su desarrollo. 500 millones provienen del presupuesto de la UE, 300 millones vienen directamente de diversos países europeos. El contribuyente alemán participa con 100 millones de euros, sin contar otros 100 millones que aportan al presupuesto de la UE.
¿EULEX-UNMIK?
Pasó casi un año hasta que en diciembre pasado la misión civil de la UE en Kosovo EULEX, compuesta por 1900 expertos europeos, entre ellos 1400 policías y 300 jueces y fiscales, iniciara sus labores. Esta demora no dependió de falta de capital. Cuenta con 205 millones de euros para cubrir sus gastos durante los próximos 16 meses. El problema radicó en que la UE logró acordar a duras penas una coexistencia con la misión de la ONU para Kosovo, UNMIK, fundada como administración de transición en 1999 después de 78 días de bombardeos continuos por parte de la OTAN contra la expulsión de los albano-kosovares por parte de los serbios. UNMIK debía ser sustituida por EUELX, pero no sucedió así.
Precedente Kosovo
La independencia de Kosovo representa un corte en las relaciones internacionales que ha generado grietas no sólo en el seno de la UE. En el Consejo de Seguridad de la ONU, Rusia bloqueó con amenaza de veto la retirada de la UNMIK y advirtió a la UE y a Estados Unidos no sentar un "precedente peligroso".
Alejarse del reconocimiento de la integridad territorial de Serbia, conduciría a una "reacción en cadena en los Balcanes y en otras partes del mundo", según el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov. Por su parte la UE argumentó siempre que el reconocimiento de Kosovo se trataba de un caso especial que no sentaba precedente. Moscú no comparte esta visión. En agosto pasado Rusia reconoció la independencia de Georgia de las separatistas Abjasia y Osetia del Sur.