1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Japón no podrá pescar más ballenas en el Antártico

31 de marzo de 2014

La Corte Internacional de la ONU considera que los aducidos "fines científicos" para la pesca de cetáceos escondían fines comerciales. La decisión causa "profunda decepción" en Tokio que, sin embargo, la acatará.

https://p.dw.com/p/1BZEx
Walfang in Japan
Imagen: picture-alliance/dpa

El Tribunal Internacional de La Haya ordenó hoy a Japón poner fin a la pesca de ballenas. En un fallo histórico para la conservación de esta especie, el máximo órgano judicial de las Naciones Unidas declara que los fines con que se capturaba a estos grandes cetáceos no eran, como se venía declarando, científicos, sino comerciales.

Japón había aprovechado un vacío legal en la prohibición que desde 1986 pesa sobre la pesca de cetáceos afirmando que se hacía para recabar información científica, aunque admitía que la carne de estos grandes mamíferos acuáticos se utilizaba para alimentación. Es una carne muy apreciada por los consumidores japoneses, que la consideran un manjar.

Acatamiento y decepción

El jefe de los negociadores nipones, Koji Tsuruoka, declaró ante la prensa al salir del Tribunal Internacional: “Como país que respeta el imperio de la ley y como miembro responsable de la comunidad internacional, Japón acatará la decisión de la Corte”. Esto a pesar de la “profunda decepción” que ha causado en las autoridades japonesas la decisión de La Haya.

CIJ prohíbe a Japón la caza de ballenas en la Antártida

Australia, que presentó la demanda ante el tribunal, ha contabilizado más de diez mil ballenas capturadas por los pesqueros nipones desde 1988. En el Pacífico Norte, Japón sigue teniendo permiso para matar hasta 500 ballenas al año en cacerías que aducen los mismos “fines científicos” que ahora han sido desautorizados. Únicamente tres países en el mundo continúan con la pesca ballenera: Japón, Islandia y Noruega. Aunque solo en el primero se aducía la investigación científica como pretexto.

LGC (afp, reuters)