ISPO: A toda carrera

Correr está de moda. Más de 15 millones de alemanes mayores de 14 años practican este deporte, cuyos adeptos aumentaron en un 12% entre 1999 y el 2001. Por suerte para la industria de los artículos deportivos, no se contentan con lanzarse simplemente a devorar kilómetros, como Forrest Gump, sino que requieren el equipo adecuado. Y están dispuestos a pagar su precio. Por ejemplo, una buenas zapatillas encuentran fácilmente compradores, aunque cuesten mucho más de 100 euros.

Este segmento del mercado de artículos deportivos ha experimentado un crecimiento cercano al 16%. No es de extrañar, en consecuencia, que en la mayor feria del ramo se le haya dedicado una sección especial. La "running ISPO", con todo tipo de accesorios y modelos que abarcan desde la onda "retro" hasta los diseños de corte futurista. Por ejemplo, Adidas presenta unas nuevas zapatillas que, si se da crédito a la publicidad, prácticamente corren solas. También existen zapatillas a medida, que se adaptan en forma individual al pie y las necesidades de quien las calce.

El impacto de la crisis

El boom del running mantiene en alto las esperanzas de los fabricantes y comerciantes del ramo, que también están sintiendo los embates de la crisis económica general. Aunque el deporte y la recreación ocupan un lugar destacado en la sociedad de nuestro tiempo, las ventas decaen. En el primer semestre del año, las ganancias bajaron en un 3% en Alemania, cifrándose en 7.890 millones de euros.

Las dificultades también se reflejan en la Ispo. Al igual que en la versión de invierno de la muestra, resulta notoria la ausencia de grandes marcas como Puma o Nike. El mayor productor europeo de artículos deportivos, Adidas-Salomon, redujo por su parte el tamaño de su área de exposición.

Cuestión de emociones

Sin embargo, el sector no ha perdido el optimismo. El presidente de la asociación de comerciantes alemanes del área, Klaus Jost, asegura que la tarea más importante consiste en entusiasmar al cliente, pese a los problemas económicos. "En el deporte, las emociones siguen siendo la principal fuente de motivación a la hora de hacer compras", asegura. Y cita como ejemplo el impulso que proporcionó el mundial de Asia. Gracias a él las ventas de pelotas y zapatos de fútbol aumentaron un 31% y un 20%, respectivamente.

Por lo demás, a las empresas no les falta ingenio para tentar a los deportistas con nuevos productos, o darle un nuevo enfoque a los artículos más tradicionales. Así es como vemos renacer a los viejos patines, rebautizados eso sí como "four-wheeler". Es cuestión de creatividad y espíritu deportivo.