Irán ante el juez atómico
26 de noviembre de 2003La OIEA (Organización Internacional para la Energía Atómica) se reunió en Viena para evaluar el incumplimiento de Irán del pacto antinuclear. Las acusaciones contra el país asiático se basan en las sospechas de EEUU de que Irán está desarrollando armas nucleares encubriendolas con su programa nuclear para usos civiles. La OIEA mantuvo la serenidad y dicto un veredicto contra Iran sin apoyar la postura inicial de EEUU.
Triunfó la equidad
Según el informe de la OIEA, en Irán se encontraron señales que indicaban la importación de uranio y tecnología nuclear . Un tratamiento adecuado del uranio lo hace compatible para la fabricación de armas nucleares. Las inspecciones de la OIEA dieron su fruto y confirmaron el incumplimiento del pacto de no proliferaciónde armas nucleares, pese a las afirmaciones del gobierno iraní, de que el uranio y la tecnología importada estaban destinadas al uso civil, es decir, a la producción de energía.
Sin embargo, los inspectores no pudieron rebatir al gobierno iraní sus afirmaciones ya que no encontraron pruebas de lo contrario. EEUU inició en ese momento una campaña internacional con la que quería lograr el apoyo de otros países para someter a Irán al dictamen del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Alemania, Francia e Inglaterra no apoyaron la iniciativa estadounidense por considerar que pondría en peligro la cooperación que Iran mostraba con los inspectores.
La OIEA dictó sentencia para deshacer todo este cruce de acusaciones y optó por una solución equitativa. La resolución es una advertencia contra el gobierno de Teherán para que no incumpla de nuevo el pacto, bajo la amenaza de sanciones más severas. El presidente del consejo de la OIEA, Mohamed ElBaradei consideró la resolución como “una advertencia a Irán para que respete las directivas de la comunidad internacional.”
El triunfo de Irán
El portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Hamid Resa Assefi, consideró la decisión de la organización un triunfo del pueblo iraní y una muestra de la transparencia con la que el gobierno iraní pone sobre la mesa internacional su programa nuclear. Las presiones de algunos países no tuvieron efecto y mostraron que Irán no quería construir ninguna bomba atómica. El ministro de Asuntos Exteriores Iraní, Ali Akbar Saleh, mostró también su apoyo la decisión: “Por supuesto que hubiesemos deseado un texto mas favorable pero estamos de acuerdo con la proposición”, dijo el ministro.
En cualquier caso, Irán se comprometió a firmar un protocolo adicional sobre armas nucleares para acallar las sospechas de la comunidad internacional, permitiendo la entrada libre de los inspectores a todos los centros de investigación nuclear del país.
La decisión de la OIEA no contempla la posterior intervención del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas en caso de un nuevo incumplimiento del pacto, como había propuesto EEUU. Sin embargo, sí contempla las próximas medidas que deberán tomarse si Irán incumple de nuevo. Éstas suponen una intervención inmediata de la OIEA antes de llegar al extremo de someterlo a las Naciones Unidas. La resolución sirve de aviso o amenaza según la disposición de Irán de tratar con la máxima transparencia su programa nuclear.