Internet para países en desarrollo: ¿Google filantrópico?
24 de octubre de 2008Dotar a 3.000 millones de personas de acceso a Internet de alta velocidad y a un precio asequible. Ése es el objetivo de O3b Networks, una compañía creada por el empresario de telecomunicaciones Greg Wyler, y que ya ha sumado para el proyecto el apoyo de Google, el banco HSBC y el operador de cable Liberty Global. O3b -de "other 3 billion", "otros tres mil millones"- busca cubrir con su iniciativa a zonas de Asia, África, América Latina y Oriente Medio hasta ahora sin conexión.
Se trata de extensos territorios del planeta donde hasta ahora era casi una quimera disponer de acceso a Internet. Por un lado, por las dificultades muchas veces puramente geográficas para realizar un tendido de fibra óptica. Por otro, por la imposibilidad de comercializar con éxito un producto de tal calidad a precios asequibles para los habitantes de dichas regiones.
La solución, en el espacio
Si no puede ser por tierra -el acceso a banda ancha en África es 20 veces más caro en África que en Estados Unidos por las dificultades para distribuir cable- ni por mar -los cables submarinos sólo se utilizan actualmente entre los países desarrollados- será desde el espacio.
Así, el proyecto tirará adelante gracias al lanzamiento de una constelación de satélites. En concreto, de los denominados MEO ("Medium Earth Orbit" o satélites de órbita terrestre media). El primero de un total de 16 estará en el espacio a finales de 2010. Este tipo de satélites -situados a unos 8.000 kilómetros de altura- ofrecen múltiples ventajas respecto a los geoestacionarios -que orbitan a unos 36.000 kilómetros de distancia de la Tierra-. Sobre todo, que la conexión es mejor y más rápida.
Por si fuera poco, además es más barata. Incluso teniendo en cuenta que son necesarios 16 satélites en lugar de uno. El motivo, que cuanto más baja es la altura a la que orbita el satélite, menor es la cobertura terrestre que puede ofrecer. Así, cuando un satélite desaparece tras el horizonte, otro le sustituye y mantiene la comunicación.
Precios asequibles
Los promotores de la iniciativa están convencidos de la bondad de sus intenciones. Y los números parecen darles la razón. Según el mismo Wyler, el sistema de satélites permitirá ofrecer cobertura de calidad a un precio ocho veces menor que el de un satélite geoestacionario. Según han anunciado, las velocidades que ofrecerán llegarán a 10 Gigabites por segundo.
Además, y teniendo en cuenta que se tratará de un servicio mayorista al que podrán acceder las operadoras locales para posteriormente revender los productos de banda ancha a los usuarios finales, Wyler cree que la iniciativa servirá para desarrollar el sector en las regiones beneficiadas. "Como proveedor de servicios de Internet o como pequeña empresa deberá invertirse quizás un par de miles de dólares para recibir conexión a Internet", afirma el empresario estadounidense. Para una empresa grande, "quizás 100.000 o 200.000 dólares, una quinta parte de lo que cuesta la conexión con fibra óptica".
Una inversión rentable
De lo que no hay ninguna duda es del potencial del proyecto, dotado con una inversión de unos 515 millones de euros -650 millones de dólares-. Tres mil millones de personas con acceso potencial a Internet y a servicios de voz no sólo será un buen negocio para las empresas del ramo de las telecomunicaciones.
Como remarca el mismo Wyler, "observaremos contenidos generados localmente, un e-learning extendido, telemedicina y muchas más posibilidades para el crecimiento social y económico". También, claro, audiencia potencial para multitud de empresas. Más clientes, y más ingresos.