Inteligencia alemana, otra vez, en el ojo del huracán
11 de noviembre de 2015El ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, anunció que pedirá explicaciones a Berlín sobre el supuesto espionaje del que, según medios germanos, fue víctima por parte del Servicio Federal de Información (BND) alemán.
"Escuchar eso es muy desagradable", dijo Fabius en declaraciones recogidas por la cadena BFM TV, al margen de la cumbre de la Unión Europea (UE) y África organizada en Malta para buscar una acción común frente a la inmigración irregular.
La cadena de radiodifusión pública de Berlín-Brandeburgo rbb, indicó este miércoles (11.11.2015) que el BND espió a Fabius, además de a varias organizaciones internacionales, así como a empresas europeas y estadounidenses.
La información no fue confirmada ni desmentida por el Gobierno alemán, que aseguró que aclarará "completamente" el tema, e informará a la comisión de secretos oficiales del Bundestag (Cámara baja del Parlamento germano).
"Entre amigos no se espía"
"En el perfil de labor del (servicio de espionaje exterior) BND no figura el espionaje político a Estados aliados", aclaró la viceportavoz de la canciller Angela Merkel, Christiane Wirtz. La funcionaria, aseguró que sigue vigente la máxima de Merkel de que "entre amigos no se espía".
Según la información de rbb, en el punto de mira de la inteligencia alemana habrían estado también el Tribunal Internacional de La Haya, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), la Organización Mundial de la Salud (OMS), el FBI y compañías tanto europeas como estadounidenses, entre ellas, la empresa de armamento Lockheed.
Boomerang
Adicionalmente, la inteligencia alemana habría intervenido conversaciones del diplomático alemán Hansjörg Haber, que dirigió de 2008 a 2011 la misión de observadores de la UE en Georgia, posteriormente encabezó el equipo de planificación del servicio diplomático de la UE en Bruselas, y en la actualidad es embajador alemán en Turquía.
El portavoz del Ministerio alemán de Exteriores, Martin Schäfer, señaló que los diplomáticos alemanes son conscientes de que sus actividades interesan a otros y toman los recaudos necesarios. Pero aclaró que "nadie en el Ministerrio alemán de Exteriores creería que está siendo escuchado por el BND".
Esos objetivos se encuentran en el informe de 900 páginas que el BND ha entregado al Bundestag con números de teléfono, correos electrónicos y direcciones IP, los denominados selectores, utilizados por los servicios de inteligencia alemanes al menos hasta octubre de 2013.
El informe ha sido remitido a la comisión encargada de esclarecer el espionaje a gran escala de EE. UU. a ciudadanos y países aliados, que investiga ahora si los propios servicios secretos germanos espiaron a sus socios de la UE y objetivos estadounidenses.
RML (efe, dpa)