Hungría mantendrá su polémica ley contra la inmigración
24 de septiembre de 2018
El Gobierno húngaro no retirará la polémica ley que criminaliza la ayuda por parte de ONG a los inmigrantes, después de que ese texto haya sido denunciado este lunes (24.09.2018) ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo por la Open Society Foundations (OSF), del magnate estadounidense George Soros.
"Está claro que no suspenderemos la ley Stop Soros. Ya hemos analizado todo, hemos aprobado la ley. No tenemos intenciones de suspender la ley", aseguró el viceprimer ministro húngaro, Zsolt Semjén a la televisión privada, ATV.
"Ley Stop Soros" es como el Gobierno húngaro se refiere a esa regulación, en referencia al millonario de origen húngaro George Soros, al que Budapest acusa de planear, en connivencia con la Unión Europea, traer al continente a millones de inmigrantes. "¡Adelante! Este es un país libre" agregó Semjén, al ser preguntado si el gobierno del primer ministro húngaro, el nacionalista Viktor Orbán, retirará o no la polémica ley después de la denuncia de la OSF.
Esa fundación informó este mismo lunes de que ha elevado una denuncia ante el Tribunal Europeo contra esta ley, al entender que "quiebra la garantía de la libertad de expresión y de asociación consagradas en el Convenio Europeo de Derechos Humanos".
La legislación incluye una enmienda del código penal nacional que declara ilegal que las personas o grupos civiles apoyen a quienes solicitan asilo o residencia. La norma fue ampliada el pasado julio con una ley adicional que grava con un 25% de impuestos la financiación de cualquier actividad u organización que promueva o retrate "positivamente" la migración, señala la OSF.
Según esa organización, las provisiones legales están escritas de manera tan amplia que su efecto "espeluznante y de largo alcance" va más allá de la migración y alcanza el trabajo de toda la sociedad civil.
Una batalla en torno a los valores de Europa
La ley fue aprobada gracias a la mayoría de dos tercios de que dispone el gobierno en el Parlamento y es parte de las duras políticas anti inmigratorias de Orbán, muy crítico con todas las iniciativas de la UE en materia migratoria.
La Comisión Europea abrió en julio un procedimiento de infracción por esta ley, pues la considera contraria a los valores europeos y estima que vulnera el derecho comunitario.
La OSF se retiró de Hungría después de 30 años a causa del "entorno hostil político y legal" que implicó una "campaña de odio durante dos años del Gobierno húngaro a las fundaciones y sus socios", se indica en el comunicado.
EAL (efe)
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