Huir de Afganistán: de Kabul a Ramstein... ¿y después?
17 de septiembre de 2021Zarah logró salir de Afganistán con sus tres hijas pequeñas, en uno de los últimos aviones de evacuación de Kabul a Qatar, a finales de agosto. Y luego voló a Alemania, a encontrarse con su marido, que había trabajado durante años para una organización alemana, y ya la estaba esperando.
Ramstein, en el suroeste de Alemania, es la mayor base aérea estadounidense fuera de Estados Unidos, y el cuartel general de las fuerzas aéreas de esa potencia mundial en Europa. Allí, Zarah hizo el papeleo, con la idea de comenzar una nueva vida en familia. Después de todo, ya había completado la parte más difícil del viaje, la huida de su tierra natal, ¿qué podía salir mal ahora?
Quien intenta quedarse en Alemania choca con la burocracia alemana
Pero el plan no funcionó. Zarah se encuentra ahora en Indiana, en el Medio Oeste de Estados Unidos, a 7.000 kilómetros de Ramstein, en un campamento con otros 6.000 refugiados.
EE.UU. sacó a decenas de miles de personas de Afganistán en agosto, después de que los talibanes tomaran el control de la capital, Kabul. Actualmente, Ramstein alberga a 9.000 personas.
Zarah, afgana, pasó cinco días en la base estadounidense; pidió ayuda para quedarse en Alemania a diversas instituciones: el Ministerio del Interior, la Oficina de Extranjería, la Sociedad Alemana de Cooperación Internacional, la Embajada de Alemania en Doha, Qatar, y la Oficina Federal de Migración y Refugiados. El problema: el procedimiento de asilo de su marido aún no se ha tramitado, por eso, aún no ha podido solicitar la reunificación familiar.
Si las cosas van mal y, por ejemplo, la burocracia alemana se interpone en el camino, como ocurrió con Zarah, los refugiados afganos son trasladados en avión, a menudo para realizar controles de seguridad, a un lugar en el que quizá nunca hubieran querido aterrizar: Albania o incluso Ruanda. Si todo va bien, Ramstein es el lugar de un final feliz para muchos.
Mega ciudad de tiendas de campaña para refugiados
La base militar estadounidense en Alemania parece una fortaleza en estos días: es casi imposible acceder a la enorme ciudad de tiendas de campaña, que se ha instalado a una velocidad récord para decenas de miles de refugiados afganos.
Ralf Hechler, alcalde de Ramstein-Miesenbach desde hace cinco años, es uno de los pocos a los que se les ha permitido entrar en la base aérea de 1.400 hectáreas. "No puedes imaginarlo, tienes que verlo", dice Hechler. "Dos kilómetros y medio de tiendas y tiendas, contenedores para ducharse, aseos nuevos, suministro de agua. Y un tercio de los refugiados eran niños y jóvenes." 70 mujeres soldados de las Fuerzas Armadas alemanas están siendo trasladadas a Ramstein para cuidar de las mujeres y los niños afganos.
Entrega de comida vegetariana y un llamado de ayuda
Al principio de la evacuación de los refugiados afganos, de repente había que alimentar a miles de personas de un día para otro. "Llevamos 6.000 comidas al cuartel, lasaña de verduras, fideos con queso, pimientos rellenos, todo vegetariano”, dice Hechler.
El alcalde también lanzó un llamado en Facebook: al cabo de unas horas, se acumularon en el centro de la ciudad montañas de ropa, alimentos y juguetes para los refugiados.
Unas 2.350 personas de Ramstein realizan trabajos civiles en el aeródromo. Probablemente ningún otro lugar en Alemania esté tan estrechamente vinculado a los Estados Unidos, desde que la base militar comenzó a funcionar hace casi 70 años. Todas las tiendas, por pequeñas que sean, se anuncian en alemán e inglés, para captar clientes. En los alrededores, en la región de Kaiserslautern, viven actualmente más de 50.000 militares estadounidenses con sus familias.
El brote de sarampión altera los planes de evacuación
Ralf Leßmeister es el gobernador del distrito de Kaiserslautern desde 2017 y, al igual que Hechler, es el primer punto de contacto para los militares estadounidenses. Cuando se descubrió que cinco refugiados afganos que habían aterrizado en Estados Unidos estaban infectados de sarampión, recurrieron a él.
"Para las primeras 100 dosis de vacunas corrimos a nuestra farmacia aquí en el hospital y las llevamos a Ramstein en dos horas", dice. Debido a que los 9.000 refugiados que aún permanecen en la base militar tienen que ser vacunados sobre la marcha, los vuelos de evacuación se han suspendido por el momento.
Estados Unidos todavía quiere sacar a todos los refugiados el 30 de septiembre, dice Leßmeister. En principio, se acordó con Alemania que las personas más vulnerables no pasarían más de diez días en la base militar, pero el brote de sarampión saboteó ese plan. Así que la evacuación completa en solo dos semanas parece demasiado optimista.
Los primeros refugiados esperan la decisión de asilo para Alemania
Leßmeister y su equipo también tuvieron que ocuparse de las urgencias médicas: 20 heridos graves, víctimas de los atentados terroristas de Kabul, fueron trasladados a los hospitales de los alrededores, y del vecino estado de Sarre. Leßmeister también vela por los refugiados que han solicitado asilo en Alemania desde Ramstein, y que ahora esperan la decisión en las bases militares de Kusel, Tréveris er o Bitburgo.
La Dirección de Supervisión y Servicios, autoridad administrativa central del estado federado de Renania-Palatinado, donde se encuentra Ramstein, escribe al respecto, en respuesta a una consulta de DW: "Un total de 463 personas de los vuelos de evacuación han sido acogidas hasta ahora en Renania-Palatinado, de las cuales unas 210 han sido entregadas a la Policía Federal por las fuerzas estadounidenses."
Tribunales alemanes también subestimaron la situación en Afganistán
Philipp Pruy, abogado especializado en derecho migratorio en Regensburg, representa actualmente a más de 100 afganos. Sus clientes recién van llegando de Afganistán o, son personas cuya solicitud de asilo ya ha sido rechazada una vez, y que ahora presentan una solicitud de seguimiento.
"En los últimos años, las posibilidades de éxito de estas solicitudes de asilo eran bastante dispares", dice Pruy. "Aunque la gente ya alegaba persecución por parte de los talibanes, en ese momento los tribunales argumentaban que tenían una vía de escape alternativa en el propio país, hacia Herat, Mazar-e Sharif o Kabul".
Los tribunales locales también ignoraron el empeoramiento de la situación en Afganistán hasta el final, dice el abogado.
Mayores posibilidades de éxito para el asilo en Alemania
"Las posibilidades de que los refugiados afganos obtengan asilo han mejorado considerablemente desde que los talibanes tomaron el poder. Ahora no hay más opciones de huir en el propio país. Y si se les deporta, se enfrentan a un trato inhumano y degradante", confirma Pruy.
Los 9.000 refugiados restantes en Ramstein son principalmente afganos que han trabajado como fuerzas locales para Estados Unidos. Sin embargo, Pruy está convencido de que también tendrían las mejores oportunidades de obtener asilo en Alemania. La base militar está en territorio alemán, por lo que los refugiados entrarían por primera vez en suelo europeo y, por tanto, se aplicaría el Reglamento de Dublín.
Así que según el experto en derecho migratorio: "Basta con acercarse a los agentes de la Policía Federal en el recinto de la base militar y pronunciar la palabra asilo, para que la Policía tramite la solicitud a la Oficina Federal de Migración y Refugiados." (ee/rml)