Jubilados, activos y con compromiso social

A sus 80 años, el apicultor Erich Faltus, proveniente de Baja Sajonia, se encuentra en Cachi, en la norteña provincia argentina de Salta, asesorando a productores de miel. Para este experto alemán, el objetivo es entregar "conocimientos actuales de apicultura, amor por las abejas y no pensar primero en ganar de dinero. El trabajo bien hecho genera su valor”.

Erich Faltus es uno de los más de doce mil voluntarios del Senior Experten Service (SES), una fundación de la industria alemana para la cooperación internacional que busca aprovechar el enorme capital que representan los profesionales ya jubilados. Faltus ha participado desde 2004 en varias misiones SES en Chile, Uruguay, Brasil y Argentina, ya sea en grandes proyectos o pequeñas asesorías: exitosas experiencias que le han dejado buenos amigos.

Los expertos –con una edad promedio de 67 años– trabajan en forma voluntaria dando ayuda para la autoayuda en más de 50 áreas diferentes en emprendimientos, pequeñas y medianas empresas, organizaciones y proyectos en todo el mundo. Sus tareas van desde la calificación de personal  y mejora de la calidad de servicios y productos, hasta la reestructuración de organizaciones.

"Son mental y también físicamente jóvenes, gente muy activa, despierta y motivada, que se interesa por hacer este voluntariado. Una vez que se liberan de sus obligaciones laborales, tienen el deseo de compartir sus conocimeintos y que éstos sean reconocidos más allá de la parte monetaria”, explica Dirk Lahme, director de proyectos SES para América Latina.

Expertos accesibles

Desde su creación en 1983, la SES ha realizado más de 40 mil misiones en 161 países, principalmente en Asia, África y Europa. Estas misiones honoríficas duran entre tres semanas y seis meses, pero pueden repetirse para asegurar la continuidad y el éxito del proyecto.

"En Latinoamérica un tema muy fuerte es el de promover el modelo de formación dual, que combina la formación técnica con la parte práctica. Hay mucha necesidad de la población joven, para que puedan desempeñarse en el mundo laboral”, indica Dirk Lahme. En ese sentido, hay un fuerte apoyo en la capacitación de docentes. También la asesoría a la pequeña y mediana empresa es muy solicitada.

El SES es una conveniente oportunidad para contar con los servicios de profesionales altamente calificados. "El experto SES puede instalarse en corto plazo, sin una gran burocracia. El costo para una organización que pide un experto es relativamente económico. El experto asesora de manera voluntaria y la organización cubre alojamiento, comida, transporte, lavandería y 10 euros diarios. Alemania a su vez paga pasajes aéreos, seguro y gastos administrativos. Los expertos normalmente trabajan hasta jubilarse y este sistema permite extender la utilidad de sus conocimientos y experiencias”, comenta el arquitecto Thomas Gieth, actualmente en Buenos Aires en su primera misión SES.

Cerveza, orquestas y energía renovable

En Latinoamérica, el SES ha realizado más de 3.500 misiones. En Chile, la Cámara Chileno-Alemana de Comercio gestiona el programa desde 1985 y ha llevado a más de 140 expertos en múltiples áreas, desde cervecerías a orquestas.

En Argentina, la Cámara de Industria y Comercio Argentino-Alemana (AHK) coordina estas misiones desde 2014. "Entre las más solicitadas están las vinculadas a temas de medio ambiente, como  energías renovables y residuos. También Pymes que buscan mejorar sus procesos y producción, y también en el ámbito educativo y de formación profesional, desde escuelas con orientación en pedagogía Waldorf a una escuela tradicional”, indica Katherina Molek, de AHK-Argentina.

"El programa es cada vez más conocido y es muy bien valorado por quienes solicitan un experto. El impacto ha sido muy positivo, lo que se traduce en mejora de procesos y en la calidad de productos, impacto social, educativo y medioambiental”, agrega. Así lo confirma el arquitecto Carlos Levinton, quien solicitó una misión desde la ONG Arca Centro y el Centro Experimental de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Buenos Aires: "El intercambio de conocimientos mutuos nos lleva a mejorar la vida de los demás. La aplicación de saberes y conocimientos en ecotecnologías ha sido muy positiva y alentadora. En especial nos interesan los temas de ahorro de energía y ecoeficiencia”.

Por ello, la misión de tres meses de Thomas Gieth (69 años, experto en arquitectura sustentable de Lübeck) ha significado un gran aporte. Aunque es su primera misión, anteriormente había colaborado con la GIZ (Agencia de Cooperación Internacional Alemana) en Paraguay, Brasil, Bolivia y Argentina en diversos temas, como energía solar y materiales de construcción para viviendas sociales.

"Uno de los problemas en la Argentina este año fue el incremento repentino de los costos en la electricidad. Al estar asesorando en energías renovables para sectores más vulnerables, el impacto a través de capacitaciones es muy valioso”, destaca el arquitecto Thomas Gieth.

El compromiso social es una de las motivaciones de estos expertos, para quienes la jubilación es sólo el comienzo de una nueva etapa de actividad.

Autor: Victoria Dannemann