Hertha vs. Unión: el derbi que Berlín necesita
19 de noviembre de 2021Lejos, muy lejos está la capital alemana de tener un representante en la estratosfera del fútbol mundial. El clásico nacional ni de cerca involucra a un equipo capitalino, lo cual no significa que sea positivo o negativo. No es otra cosa que el retrato de una Alemania descentralizada. Pero hacer del derbi de Berlín uno más competitivo, es innegablemente una buena señal para el fútbol germano.
En el plano futbolístico, lo mejor que le ha podido suceder a la históricamente convulsa capital de Alemania, es encender la competencia local. Es poder mirar al rival más cercano, al del barrio de enfrente, y defender el ímpetu por no defraudar a su afición, y no en su estadio, pero en su ciudad.
Un antídoto contra la mediocridad
Si bien el primer derbi se jugó hace 47 años, un 16 de noviembre de 1974, cuando el Hertha venció al Tennis Borussia 3:0 en el Estadio Olímpico, se trataba de una rivalidad entre el Oeste de la capital. No obstante, fue en la Bundesliga 2 donde la rivalidad entre Unión y Hertha cuajó una vez que los de Köpenick (este) volvieron a la categoría en 2009, donde permanecieron una década.
Fue apenas en 2019 cuando el rompecabezas histórico de Berlín sumó una valiosa pieza: los "derbi days” de Berlín adornaban la Bundesliga con el frenético ascenso del Unión. Así, lo mejor que le pudo pasar al Hertha - miembro fundador de la Federación Alemana de Fútbol - es la llegada de su archirrival, el antídoto contra su mediocridad: un club que solo ha ganado cuatro trofeos domésticos, el último de ellos en 2002, cuando alzó la Copa de la Liga de Alemania, una competencia que solo se disputó entre 1997 y 2007, previo al inicio de la temporada regular.
Incluso hoy, aunque el saldo es favorable a "la vieja dama”, con dos victorias, una derrota y un empate en Bundesliga, el equipo dirigido por Urs Fischer puede presumir de mejores números desde su ascenso: 89 del Hertha ante 108 del Unión, que en solo dos años logró clasificarse a la Europa Conference League, mientras que los de Charlottenburg (oeste) pelean por mantenerse a flote lejos de los puestos de relegación. Una presión que en Hertha no pasa desapercibida, y mejor aún, suma al carácter competitivo de este derbi en despegue, que dicho sea de paso, retrata el pulso de la historia moderna de una metrópolis como Berlín.
Hertha busca reaccionar
Atrás quedaron los días en que Jürgen Klinsmann tiraba la toalla al frente del Hertha en señal de desacuerdo por la poca inversión de la directiva en el equipo. En la antesala de la jornada 12 del campeonato alemán, el derbi de la capital ya deja entrever una rivalidad que se forja entre pundonor y estrategia, mucho gracias al destacado andar del Unión.
Ante la presión de un Unión que llegó para quedarse, la directiva de la "vieja dama” da señales de sapiencia financiera en búsqueda de resultados sobre la cancha. De la mano de Fredi Bobic, - el arquitecto del nuevo Hertha desde el 1 de julio de este año - la institución ha tomado cartas en el asunto buscando una reacción contundente: 13 salidas y 10 nuevos jugadores, la maniobra esperanzadora del club con jugadores como el incansable Suat Serdar, el ágil Marco Richter o el técnicamente dotado Jürgen Ekkelenkamp.
Y no solo eso, en Charlottenburg, figuras como el experimentado berlinés surgido de las filas del Hertha, Kevin-Prince Boateng, advierte de la importancia de sentir la camiseta por encima de la fascinación por la ciudad.
"Creo que el mayor problema fue encontrar un equipo que entienda el ADN del Hertha, no el de Berlín", dijo Boateng, que ganó la Copa DFB con el Eintracht Frankfurt en 2017-2018. "Porque la gente ama la ciudad, hubo muchos jugadores que vinieron a firmar aquí por la ciudad. Porque les gustaba, porque es una ciudad preciosa, hay muchas cosas que hacer”, sentenció de cara a un nuevo capítulo del derbi de Berlín este sábado cuando el Hertha se meta al Stadion An der Alter Fösterei de Köpenick, donde el Unión solo ha perdido dos de sus últimos 27 partidos en Bundesliga.