Hernández asume en Honduras y promete luchar contra el crimen
27 de enero de 2014
Cuatro años tiene de ahora en adelante el nuevo presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, para cumplir con su principal promesa: luchar contra el crimen que azota a diversas ciudades del país centroamericano. Este lunes (27.01.2014) el vencedor de las elecciones del pasado mes de noviembre asumió formalmente su cargo, prometiendo “cumplir con la Constitución y sus leyes”.
Hernández, del conservador Partido Nacional, venció en las votaciones a Xiomara Castro, esposa del depuesto expresidente Manuel Zelaya. Precisamente la bancada de su partido, Libre, se ausentó de la ceremonia, en protesta porque, según Zelaya, algunos de sus militantes han sido vinculados por el nuevo jefe de Estado con la delincuencia.
A la ceremonia, que se realizó en Tegucigalpa, asistieron seis presidentes y el príncipe Felipe de España, entre otras autoridades regionales e invitados de América, Europa, Asia y África. El oficialista Mauricio Oliva, presidente del Parlamento, fue el encargado de poner la banda presidencial al mandatario, que además fue saludado por el vuelo de aviones F5 de la Fuerza Aérea hondureña.
Ayuda de Colombia y México
Hernández, un abogado conservador de 45 años que gobernará hasta 2018, es el noveno mandatario que asume de forma consecutiva en Honduras, que hasta 1982 fue gobernado por dos décadas de regímenes militares. El acto fue realizado en el Estadio Nacional, con la asistencia de miles de hondureños, quienes escucharon de boca del recién asumido líder que se tomarían medidas para sanear la economía del país, sumido en una profunda crisis.
En su discurso, el nuevo presidente también dijo que lucharía por frenar la creciente violencia del narcotráfico y llamó a Estados Unidos a reconocer su responsabilidad en ese problema. En Honduras mueren, en promedio, 20 personas al día por culpa de la violencia relacionadas con los carteles narcos. “Cualquier política para combatir la inseguridad debe tener como eje fundamental el combate a la droga, el narcotráfico, el crimen organizado, el lavado de activos y en consecuencia cero tolerancia y punto”, dijo Hernández.
“Nos parece un asunto de doble moral que mientras nosotros ponemos los muertos, la sangre de nuestro pueblo, y peleamos con escasos recursos propios, el tema de la droga para Norteamérica sea sólo un tema de salud”, dijo el flamante mandatario, quien anunció que pedirá ayuda en esta materia a Colombia y México. Hernández pretende utilizar para ello a una policía militar recientemente creada. Honduras es el segundo país más pobre de América, tras Haití.
DZC (Reuters, EFE, dpa)