Partidos infartantes: ¿Hay que eliminar los penales?
6 de julio de 2018"Tenía la cara roja y le faltaba el aire”, me decía mi madre. "Así que tuvo que tomar la pastilla para la presión”, agregaba preocupada.
Se refería a mi padre, apasionado del fútbol, que vibraba al compás de los vaivenes del partido Argentina-Nigeria días atrás.
Su salud acusaba recibo del estrés emocional.
Y, ciertamente, no es el único caso.
"El fútbol impacta en el corazón. Hay una relación entre corazón y fútbol y se intensifica en el Mundial”, sostiene el Dr. Jorge Tartaglione, Presidente de la Fundación Cardiológica Argentina.
Ni hablar, entonces, de la definición por penales. Valga citar la reciente eliminación de Colombia a manos de los ingleses. En estas situaciones los niveles de estrés pueden llegar a afectar seriamente la salud.
"Si yo veo una definición por penales, me voy a encontrar con un aumento de la frecuencia cardíaca, un aumento de la tensión arterial y de los neurotransmisores relacionados con el estrés”, explica el Dr. Tartaglione en diálogo con DW.
Fútbol como factor de riesgo
"Claramente ser fanático de fútbol es un riesgo para un corazón saludable”, afirma, asimismo, el Dr. Dietrich Andresen, Presidente de la Fundación Cardiológica Alemana.
"Tanto una definición por penales como un partido muy emocionante aumentan considerablemente el riesgo de muerte súbita en aquellas personas que ya están enfermas del corazón”, indica el cardiólogo a DW.
El problema es que no todos los que tienen alguna afección en el corazón son conscientes de ello.
"Miles de millones de personas están enfermas y no lo saben, -se calcula que entre el 15 y el 20 por ciento del total de enfermos-, y por esta razón son justamente los que corren mayores riesgos”, agrega el Dr. Andresen.
Fútbol y ciencia
Por cierto, la relación entre el fútbol y los infartos ha sido y sigue siendo objeto de estudio científico.
Con motivo de la Copa del Mundo en 2006 en Alemania, la Universidad de Múnich se dedicó a estudiar la temática.
Durante el mes que duró el evento deportivo estudió el vínculo entre el estrés emocional y la cantidad de problemas cardíacos que sufría la población, y comparó el número de personas que había tenido un infarto en el área de la ciudad de Múnich con los que habían tenido lugar en meses anteriores.
Los resultados no dejaron lugar a dudas: los problemas cardíacos aumentaron de manera considerable a lo largo de las dos horas desde iniciado el partido.
Así es que concluyeron: "Mirar un partido de fútbol estresante aumenta en más del doble el riesgo de un problema cardiovascular severo”.
¿Hay que eliminar los penales?
Tan seria es la cuestión y tan clara la correlación de los fenómenos, que el especialista argentino no duda en desaconsejar la definición por penales.
"Yo quiero que se prohíban los penales”, dice el Dr. Tartaglione a DW.
"La tensión que genera la definición por penales es una de las cosas más extremas que hay en los deportes”, explica.
"Prefiero que se defina por el gol de oro, que quien hace el gol, gane”, avanza el reconocido cardiólogo, sugiriendo nada menos que nuevas reglas para el deporte.
"Una definición más suave, de forma diferente”, propugna el Dr. Tartaglione.
"Más allá de que sea justo o injusto, desde el punto de vista de la salud, es mejor que sea de otra manera”, argumenta.
Y deja un pedido para la FIFA: "Deben considerar la anulación de los penales, por el alto riesgo de infarto que tienen las personas a las que les gusta el fútbol o que ven fútbol”.
"Más en los Mundiales, en que se incorpora gran cantidad de gente a ver los partidos”, remarca el profesional.
Consejos para cardíacos
Los especialistas alemanes, por su parte, advierten: "El que tiene un problema de corazón debería evitar mirar el partido”.
Y también: "Todo aquel que crea que puede tener algún problema cardíaco, debería realizarse un chequeo médico antes de ir al estadio o de ver un partido decisivo, para luego poder disfrutarlo sin temor”, aconseja el Dr. Andresen.
Después de todo, y aunque para fanáticos suene inverosímil: "se trata sólo de un juego”.
(PD. Mi padre está muy bien de salud y hoy es su cumpleaños.)
Maricel Drazer