Guantánamo: a la espera de que Obama cumpla
23 de junio de 2013
Estamos en el bloque B de la prisión estadounidense en suelo cubano. Soldados vigilan que el grupo de periodistas solo vea lo que la administración quiere mostrar. No podemos hacer fotos ni de cabezas ni de sistemas de seguridad.
A las 5 de la mañana en punto se escucha el llamado a la oración dirigida a los prisioneros musulmanes que cada uno ejecuta en su celda en dirección a la Meca. Todos los internos del Bloque B ocupan celdas individuales, pero no sabemos cuántos hay. Pocas veces pueden abandonarlas, ya que se encuentran atados a cadenas.
Lo que sí han registrado los prisioneros es que Obama volvió a mencionar el cierre de la prisión, como nos lo cuenta el comandante, el coronel John Bogdan: "Los internos hablan constantemente de ello, positivamente".
"Zak" nos lo confirma. Él es empleado del Ejército estadounidense y es asistente de la dirección de la cárcel. "Los prisioneros tienen esperanzas de que Obama cumpla la palabra", cuenta "Zak", que no quiere mencionar su nombre real.
¿Una huelga de hambre que importa a pocos?
De los 166 internos en Guantánamo, la mayoría yemenitas, 100 se resisten a ingerir alimentos y otros más lo harán. Más de 40 son alimentados por la fuerza. No sabemos si entre ellos se encuentran los cinco presuntos involucrados en los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001.
En una carta abierta, 13 de los internos que son alimentados por la fuerza se quejan del "maltrato irrespetuoso" y expresan su desconfianza en los médicos. Acusaciones que han sido desmentidas por la dirección del centro de reclusión.
Los médicos militares argumentan que "la alimentación forzada se hace en favor de la vida de los internos". Pero mientras Naciones Unidas considera la alimentación forzada de los presos en Guantánamo "tortura", el director de Guantánamo replica que se trata de "una práctica legal creada por los políticos".
Petición a Obama
Pardiss Kebriaei, abogada del Centro para Derechos Constitucionales, nos expresa su preocupación porque tres de los clientes que representa se encuentran en huelga de hambre y están en muy malas condiciones: "Son solo piel y huesos", dice Kebriaei y aprovecha para pedir a Obama que cumpla sus promesas.
"La mayoría de los internos podría salir de Guantánamo ya", resalta la abogada. Esta es incluso una recomendación de los mismos entes de seguridad de Estados Unidos, tras serios exámenes de sus biografías. "Si Obama no cumple pronto, morirán personas en Guantánamo".
Autor: Gero Schließ, Guatánamo /JOV
Editor: Diego Zúñiga