"Gran coalición, por razón de Estado"
18 de septiembre de 2005
"Esta jornada electoral tiene todas las características para parecerse a una en algún país tropical", acota Dieter Nohlen refiriéndose a la incertidumbre que reina en Alemania, aún horas después de cerradas las urnas.
La diferencia: "A pesar de que ambos jefes políticos contrincantes hablan de haber recibido un mandato para gobernar, nadie ha salido a gritar іfraude, fraude!".
Sorpresas te da la vida
"La sorpresa es inmensa", reconoce Dieter Nohlen cuando piensa en la reñida final que, a esta hora, daba como ganadora a Angela Merkel con una ventaja del 0,8% frente a la socialdemocracia.
Paradojas el día de las decisiones
El electorado alemán quería un cambio. ¿Pero quería también una clara decisión? Las encuestas previas a las elecciones decían, en todo caso, que la mayoría quería un cambio, concediendo, a la vez, el absoluto favoritismo al canciller Gerhardt Schröder. Lo intrincado de los resultados no refleja otra cosa que esa paradójica posición.
Descartadas las coaliciones de los partidos populares mayoritarios CDU y SPD con partidos menores, sea por no lograr una mayoría absoluta o por incompatibilidad de principios, el profesor Nohlen está convencido de que debe darse una "gran coalición".
Partidos en la encrucijada
Aclarando de que en Alemania no puede hablarse de una cohabitación, porque el alemán es un sistema parlamentario y no presidencial como el francés, Nohlen ve en la conformación de una "gran coalición" entre el partido Cristianodemócrata, CDU y el partido socialdemócrata, SPD una "necesidad de Estado".