Generación de terroristas caseros
11 de agosto de 2006Libération, de París: "El radicalismo islámico tiene mucha leña en el fuego. La versión chiita inspira a los martires en El Líbano. La versión sunita expande bajo el nombre de Al Qaida sus redes. Estos dos movimientos islámicos están confrontados entre sí. Tal vez el grupo londinense quería reforzar las consecuencias del conflicto en El Líbano o dañar el creciente prestigio de la competencia sunita. Pero no importa. El 11 de septiembre no fue una consecuencia del fracaso de los Acuerdos de Oslo como tampoco los atentados frustrados en Londres son resultado de los enfrentamientos en el sur del Líbano. La política agresiva de Bush complica el problema pero no lo soluciona. Es deseable que se logre regularizar el conflicto en el Cercano Oriente, pero no se podrá poner fin a todas las tensiones que han sido generadas por este tipo de terrorismo. Una motivo más para aprender a vivir con él."
Generación de terroristas caseros
La Repubblica, de Roma: "George W. Bush habla de fascistas islámicos, pero esta es una definición político ideológica (....) Era mucho más sencillo luchar contra el "eje del mal" o programar este tipo de combate. Lo que despierta miedo en la actualidad son terroristas individuales, que no tiene que ser ni ricos, ni aventureros, ni guerrilleros profesionales como Osama Bin Laden. En la actualidad se trata de terroristas caseros que viven lo mismo en un valle en Pakistán que en un suburbio de Londres como muchos de los 24 sospechosos que fueron detenidos por la policía británica este jueves."
Graves consecuencias
Times, de Londres:"Si el plan de los terroristas hubiera tenido éxito, entonces se habría registrado según palabras de Scotland Yard "genocidio de dimensiones inimaginables". Por lo menos 1.500 personas habrían muerto. El horror sobre lo que podría haber pasado es superado por el alivio de que se pudiera frustrar el plan. Pero aún cuando se lograra salvar la vida de inocentes las consecuencias serán igual de duraderas como las de los ataques terroristas en el metro londinense hace un año. El transporte aéreo, la seguridad pública, la tolerancia entre religiones, la armonía social y las prioridades nacionales, han sido tocadas."
Libertad en peligro
Die Presse, de Viena: "La vigilancia es el precio de la libertad, dicen. Un dilema para los librepensadores. Al Qaeda y sus hermanos espirituales atacan el corazón de la sociedad globalizada. El tránsito aéreo (conjuntamente con los contenedores marítimos y las redes de comunicación modernas) son el motor que deja funcionar al mundo en la era del Internet. Los terroristas han logrado que la libertad sobre las nubes haya dejado de ser ilimitada desde hace mucho tiempo y que el miedo sea siempre un acompañante de viaje. El éxito de las autoridades británicas no cambia esta realidad."