Gana la incertidumbre en las elecciones de Bosnia
8 de octubre de 2018
Zeljko Komsic se convirtió este domingo (07.10.2018) en el nuevo presidente croata de la Presidencia tripartita de Bosnia al vencer en las urnas a Dragan Covic, mientras que el serbio separatista Milorad Dodik proclamó su victoria sobre Mladen Ivanic para convertirse en el próximo representante de ese grupo étnico en la conducción del país.
Este domingo se elegían a los miembros de la Presidencia tripartita de Bosnia, que es el máximo órgano Ejecutivo del país y representativo a nivel internacional. La Presidencia está dirigida por un bosnio, un serbio y un croata.
En tanto, Sefik Dzaferovic, representante de SDA, el mayor partido entre los musulmanes, será el nuevo representante de los bosnios en la jefatura del país.
Los comicios tuvieron lugar en medio de nuevas tensiones entre los tres grupos étnicos del territorio: bosnios (mayoritariamente musulmanes), croatas (católicos) y serbios (ortodoxos). Los nacionalistas de cada una de las etnias quieren retener su cuota de poder y mantener el volátil statu quo. Unos 3,4 millones de personas fueron convocadas a las urnas para elegir numerosos cargos de la compleja administración multiétnica que gobierna el país.
El país está dividido en dos regiones con amplia autonomía: la República Srpska (RS), de mayoría serbia, y la Federación de Bosnia y Herzegovina, compartida por croatas y serbios. Además del Parlamento federal se votan los dos de ambas entidades, así como las presidencias regionales y a los integrantes de otros órganos subordinados.
Dodik, fuente de inestabilidad
Entre los serbios el principal candidato a ocupar la Presidencia era Dodik. Su candidatura genera temores de inestabilidad porque Dodik quiere que la RS se independice de Bosnia. También niega el genocidio de Srebrenica y otros crímenes cometidos durante la guerra.
Occidente, que ha invertido miles de millones de dólares en la reconstrucción y los intentos de reconciliación en Bosnia, considera a Dodik como el candidato más problemático además por su cercanía a Rusia. El político acusa a funcionarios occidentales de interferir en las elecciones.
El sistema, que cuenta con numerosos mecanismos de contrapeso y equilibrio de fuerzas, fue impuesto en 1995 como parte del acuerdo de paz de Dayton, mediado por Estados Unidos, que puso fin a la guerra pero a la vez dejó en manos de los líderes étnicos la posibilidad de bloquear reformas y mantener el poder en las manos de la élite política. Más de 20 años después del final de la contienda, el odio y la desconfianza persisten.
EAL (dpa)
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