¿Funcionan las prohibiciones del plástico?
13 de marzo de 2024Mientras el mundo se ahoga en una marea de residuos plásticos, países de África, Asia y de otros continentes intentan prohibir los materiales de un solo uso.
En enero, Nigeria se convirtió en el último país africano en hacer frente a la crisis de residuos, prohibiendo los plásticos de un solo uso.
El gobierno de Lagos declaró que prohibiría los envases de espuma de poliestireno y eliminaría gradualmente los plásticos no reciclables.
En el continente africano, al menos 34 países han prohibido diversas formas de plásticos y envases de un solo uso, el 99% de los cuales se fabrican con los combustibles fósiles, que impulsan el calentamiento global.
Ruanda es pionera en estos esfuerzos, ya que desde 2008 ha prohibido las bolsas y botellas de plástico de un solo uso.
Mientras tanto, en los EE. UU., la prohibición del plástico está teniendo un impacto: solo en cinco estados y ciudades del país, las prohibiciones han reducido el uso de bolsas en alrededor de 6 mil millones de bolsas por año.
Y la Unión Europea ha prohibido una gran cantidad de plásticos de un solo uso, como pajitas y envases para llevar.
Pero expertos advierten que prohibir parcialmente el plástico es solamente un paso; se necesita una reducción gradual para evitar el triple aumento en la producción proyectado para 2050.
¿Por qué recurren los gobiernos a las prohibiciones del plástico?
La gestión de los residuos plásticos en Nigeria es casi inexistente, señaló Temitope O. Sogbanmu, profesora de la Universidad de Lagos.
Según ella, los plásticos de un solo uso que obstruyen las calles y alcantarillas provocan inundaciones, que son una "amenaza" para las comunidades costeras y también ensucian los hábitats marinos.
La espuma de poliestireno utilizada para envasar alimentos es uno de los principales culpables. La falta de infraestructuras de recogida y reciclaje en Lagos hizo que la prohibición fuera la última opción para controlar el problema.
Hellen Kahaso Dena, del Proyecto Panafricano sobre Plásticos de Greenpeace África, quien hace campañas sobre las repercusiones sanitarias y medioambientales de la contaminación por plásticos en las comunidades marginadas, calificó la prohibición como "un paso en la dirección correcta".
La consulta, clave de la prohibición del plástico
Pese al apoyo de los defensores del medio ambiente, la nueva prohibición de la espuma de poliestireno en Laos recibió muchas críticas.
Los vendedores de comida de los mercados de Lagos afirman verse perjudicados y dicen que el Estado debería ofrecer alternativas.
La profesora Sogbanmu está de acuerdo en que las alternativas biodegradables "deben ser apoyadas o subvencionadas por el gobierno" para que sean accesibles. Dice que la implementación de cualquier prohibición del plástico requiere tanto una acción legislativa de arriba hacia abajo, como su aplicación, así como una fuerte consulta y educación de abajo hacia arriba, especialmente entre la gran población juvenil de Nigeria.
En el caso de Ruanda, el "compromiso ciudadano" fue clave en el esfuerzo por "mantener la limpieza, reducir la contaminación y ofrecer alternativas al plástico para hacer realidad la visión", declaró el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en noviembre de 2023. El gobierno ruandés colaboró con colegas noruegos para poner en marcha un tratado mundial para acabar con la contaminación por plástico para 2040.
Weyinmi Okotie, responsable de la campaña de energía limpia de Global Alliance for Incinerator Alternatives y Break Free From Plastics Africa, ha observado que la disponibilidad de espuma de poliestireno en Lagos ha disminuido significativamente desde que se puso en marcha la prohibición, a causa, según él, del miedo a ser detenido. Pero, ¿funciona siempre esta amenaza?
Por qué algunas prohibiciones fracasan
En Kenia se prohibieron las bolsas de plástico en 2017, pero siete años después están aún presentes en los mercados del país.
Según Dorothy Otieno, la industria local del plástico se opuso a la prohibición y trasladó sus operaciones al otro lado de la frontera, a Uganda, donde no hay prohibición.
A pesar de que tanto vendedores como compradores de bolsas de plástico están amenazados con penas de cárcel y una multa de 4 millones de chelines kenianos (unos 28.900 dólares o 26.300 euros), Otieno afirma que su bajo costo sigue atrayendo a los consumidores de menores ingresos.
El fracaso de no conseguir que las comunidades adopten prohibiciones de plástico también ilustra la necesidad de establecer de forma progresiva la prohibición de envases comunes y baratos, afirmó Temitope O. Sogbanmu.
Sogbanmu explica que en Nigeria se consumen y desechan cada día 60 millones de bolsitas de agua de plástico, pero que una prohibición fracasaría si antes no se aplicara una solución para el agua potable.
Lo mismo ocurre en la India, donde la prohibición de plásticos de un solo uso en 2022 fracasó por la falta de alternativas asequibles y la influencia de la poderosa industria del plástico.
La prohibición mundial de los plásticos como la solución definitiva
La cooperación y la integración de las prohibiciones de plástico en África es -como en la UE, donde se aplica una prohibición de plásticos de un solo uso a todos los estados miembros- un medio potencial para hacer que las prohibiciones nacionales sean más efectivas.
Sogbanmu afirma que la solución definitiva es una prohibición mundial de los plásticos.
Se está negociando un acuerdo para hacer esto posible. Este podría reducir la contaminación mundial por plásticos en un 80% de aquí a 2040.
(mw/cp)