Exhuman restos de Neruda
8 de abril de 2013Los restos del Premio Nobel de Literatura chileno Pablo Neruda fueron exhumados este lunes en el balneario de Isla Negra, para determiner si el poeta fue envenenado en 1973 por la dictadura del general Augusto Pinochet.
"Una vez colocada la duda en el tapete me parece que es sumamente importante dilucidarla", dijo el juez que investiga el caso, Mario Carroza al justificar el peritaje, resistido inicialmente por la Fundación Neruda.
Familiares del intelectual comunista, quien murió en una clínica el 23 de septiembre de 1973, depositaron una bandera chilena sobre el féretro antes que éste fuera trasladado a la capital.
El principal denunciante del supuesto asesinato, el ex chofer del poeta, Manuel Araya, estuvo presente en el peritaje y recordó sus últimos momentos con el vate. "Diré hasta el último día de mi vida (...) que Neruda fue asesinado, porque él no estaba para morir y si no le hubieran puesto esa inyección en el estómago no hubiera muerto", subrayó el otrora empleado del intelectual comunista.
Por su parte, el director del Servicio Médico Legal, Patricio Bustos, comentó que los análisis servirán para encontrar signos del cáncer a la próstata que afectaba al artista y, eventualmente, señales de la intervención de terceros en su muerte.
Peritos chilenos y extranjeros
Aproximadamente una decena de peritos chilenos y extranjeros participaron en la remoción de tierra y apertura de la tumba. Entre los especialistas extranjeros se contaron expertos provenientes de Estados Unidos, Inglaterra y Argentina, además de miembros de la Cruz Roja Internacional. Los restos del poeta serán analizados durante tres o cuatro meses por un equipo internacional de expertos.
Neruda, partidario del derrocado gobierno socialista de Salvador Allende (1970-1973), planeaba viajar al exilio en México, cuando falleció.
El abogado comunista Eduardo Contreras, quien pidió investigar el supuesto asesinato, aseguró a dpa que "Neruda era sin duda un objetivo para Pinochet", quien asumió el poder luego del golpe del 11 de septiembre de 1973. "Junto al presidente Salvador Allende y al cantante Víctor Jara eran símbolos del recién derrocado gobierno socialista", opinó. Contreras aseveró que hay un conjunto de indicios que "hacen razonablemente presumir una probable intervención de terceros" en la muerte de Neruda.
er (dpa, reuters)