Los agricultores mexicanos emplean heces humanas como abono
29 de marzo de 2022Los fertilizantes artificiales están prohibidos en la granja de Tomás Villanueva, en el pequeño municipio de Tepetixtla, en el Estado de México. Todos los productos se abonan con estiércol humano casero. Dice que las heces y la orina tienen mala fama, pero el proceso de compostaje es higiénico y mejor para el suelo y la biodiversidad.
La escorrentía agrícola de los fertilizantes artificiales está dañando el suelo y los insectos, así como contaminando el agua en México. Por ello, algunos agricultores, como Villanueva, están recurriendo a las heces y la orina humanas transformadas en compost para proporcionar a las plantas los nutrientes necesarios. El proceso también ahorra agua y reduce la contaminación porque los excrementos no se vierten al sistema de alcantarillado. Muchas de las aguas residuales del país van a parar directamente a los ríos, los lagos y al mar.
Objetivo del proyecto: algunos agricultores mexicanos están abonando sus cultivos con compost higiénico hecho de excrementos humanos con el objetivo de ayudar al medio ambiente.
Organizaciones asociadas: granja orgánica Ollin Tlalli, proyecto agrícola Arca Tierra, barrio ecológico Ecotepec, fundado por el arquitecto César Añorve.
Un videorreportaje de Anna-Marie Goretzki y Pablo García Saldaña