Excapo de la Camorra: “No recuerdo a cuántos he matado”
7 de junio de 2014Antonio Iovine, uno de los mafiosos más influyentes de Italia, asegura no recordar cuántas personas ha matado durante su trayectoria criminal. El excapo de 49 años decidió cooperar con la Justicia recientemente y protagonizó su primera comparecencia este sábado (7.6.2014) ante el tribunal que no recuerda a cuántas personas ha matado durante su trayectoria criminal. Iovine es el desertor de mayor jerarquía de la Camorra, el ramo napolitano de la mafia italiana, y miembro de la temida familia Casalesi. Fue detenido en 2010 después de haber estado huyendo de la Justicia durante 16 años. "He cometido muchos asesinatos. No me acuerdo de todos", dijo a los jueces en la ciudad de Santa Maria Capua Vetere, próxima a Nápoles. Iovine habló por videoconferencia desde un lugar secreto; él se encuentra bajo protección de la policía. Cuando decidió cooperar con las autoridades, Iovine pidió ser sacado de la prisión de alta seguridad donde estaba recluido, alegando padecer de claustrofobia. Apodado "O ninno" (“el niño”, en dialecto napolitano) por su aspecto juvenil, Iovine fue escalando puestos dentro de la Camorra hasta convertirse en "ministro de Economía" de esta organización mafiosa, encargado de supervisar la inversión de miles de millones de euros provenientes de actividades criminales en negocios legítimos. Bajo la responsabilidad de Iovine, la Camorra se extendió por Italia y Europa comprando restaurantes y hoteles e infiltrándose en contratos para obras públicas, al tiempo que mantenía su lucrativo negocio del almacenamiento de basura tóxica en Campania, la región alrededor de Nápoles. Las autoridades esperan que el excapo revele las conexiones políticas y comerciales de alto nivel que permitían a la Camorra su fuerte crecimiento durante las últimas décadas. Iovine admitió ante el tribunal que mantiene frecuentes contactos con hombres de negocio y alcaldes de la región de Nápoles. Iovine también informó que hasta el año 2010 disponía de una cantidad mensual de 100.000 euros para sus necesidades personales y para pagar a sus subordinados y a las familias de miembros encarcelados de la Camorra. (dpa)