Evacuación de Enerhodar por posible contraofensiva ucraniana
12 de mayo de 2023"Estoy extremadamente preocupado por los riesgos de seguridad, muy reales”, ha dicho Rafael Grossi, jefe de la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA), sobre la situación en torno a la planta de energía nuclear de Zaporiyia, ocupada por Rusia.
Según él, la situación se está volviendo "cada vez más impredecible y potencialmente peligrosa". Por ese motivo, Grossi enfatiza en el sitio web de la OIEA que, con el objetivo de prevenir el riesgo de un accidente nuclear grave, es necesario proteger la planta nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa.
Grossi la visitó marzo de 2023, y emitió su advertencia después de que Moscú ordenara la evacuación de la ciudad de Enerhodar, donde se encuentra la planta, porque, al parecer, los bombardeos ucranianos están aumentando. Expertos de la OIEA que se encuentran in situ, confirman que la evacuación ya ha comenzado.
Colaboración, averías y pánico
"La gente está asustada y advierte sobre una contraofensiva del Ejército ucraniano. Berdiansk debe ser evacuada", dice un concejal del ayuntamiento, que ha huido de Enerhodar y no desea ser identificado, porque teme que sus padres puedan ser acosados, ya que aún siguen en el territorio ocupado.
Pavlo*, un antiguo empleado de la central nuclear de Zaporiyia, dice que "la evacuación está siendo dirigida por un colaborador, el yerno de un exdirector de la central eléctrica. Solo se llevan a las personas que quieren marcharse o a quienes temen el regreso de las autoridades ucranianas. Pero tenemos miedo de que más tarde seamos deportados por la fuerza".
Otra residente de Enerhodar es Liudmila*. No le queda claro el motivo de la evacuación, porque, según explica, últimamente no ha habido ningún enfrentamiento. Pero todos los jardines de infancia y escuelas llevan cerrados desde el 6 de mayo. "Nos dijeron que los niños y sus padres, los ancianos y los enfermos debían estar preparados para la evacuación. También hay una línea directa donde registrarse para conseguir transporte".
Sin embargo, según Liudmila, ha habido problemas con los traslados. Algunos autobuses tuvieron averías, por lo que la gente estuvo mucho tiempo en la carretera. Hubo gente que no fue llevada a la ciudad ocupada de Berdiansk, como se les prometió, sino a Rusia. Otros fueron alojados en edificios inhabitables o remotos.
Liudmila asegura que todos los empleados de las fuerzas de ocupación en Enerhodar también fueron enviados a casa, por lo que a muchos colaboradores y a personas con pasaporte ruso les entró pánico. "Algunos de nuestros conocidos con pasaporte ruso condujeron inmediatamente su automóvil hacia Crimea. Pero hubo un embotellamiento y no llegaron a la península, por lo que se quedaron momentáneamente en Henichesk, en el mar de Azov".
¿Qué pasará con los trabajadores de la central nuclear de Zaporiyia?
Ciudadanos de Enerhodar cuentan a DW que, después de más de un año de ocupación rusa, solo queda un tercio de los 53.000 habitantes de la ciudad. La mayoría de ellos son trabajadores antiguos o actuales de la planta nuclear con sus familias, a quienes no se les permite salir de la ciudad. "Incluso aquellos que se niegan a trabajar para las fuerzas de ocupación y ya no tienen acceso a la planta de energía nuclear, no pueden irse y son devueltos a los puestos de control", dice Pavlo.
Desde que se anunció la evacuación, muchas tiendas y locales de bancos ucranianos, donde operaban bancos rusos, han cerrado en la ciudad. "El 6 y 7 de mayo, el Promsvyazbank ruso hizo las maletas y se fue", dice Pavlo.
El concejal informa que ya se ha retirado todo el equipo médico del hospital de la ciudad. "Primero se llevaron a sus propios heridos, luego a los pacientes de diálisis. Fueron enviados a Eupatoria, en Crimea, durante dos semanas, según les dijeron”.
Hay escasez de ciertos alimentos en la ciudad. Las gasolineras y los cajeros automáticos también están vacíos. Los residentes de la ciudad solo confirman parcialmente la escasez de alimentos y artículos de higiene. "En lo que respecta a los comestibles, no hay mucha presión, porque nos hemos abastecido de reservas para un año: cereales, comida enlatada, agua por si acaso", dice Pavlo. Él y otros residentes locales esperan que el Ejército ucraniano libere su ciudad de la ocupación rusa lo antes posible.
* Nombre cambiado por los editores
(ms/ers)