Planes estelares
9 de enero de 2012De momento, los exploradores del espacio europeos pueden estar tranquilos: su presupuesto para 2012 se mantiene constante en los aproximadamente 4.000 millones de euros que han venido recibiendo los últimos tiempos. La Agencia Espacial Europea, que se financia principalmente a partir de las cuotas de los 18 Estados que la integran más una aportación de la Unión Europea, tendrá que costar dentro de tres años 175 millones de euros menos que ahora. Pero teniendo en cuenta que los recortes ya afectan con fuerza a las partidas científicas de muchos países comunitarios, el balance no es del todo negativo.
Confirmados los ingresos para los próximos 12 meses, la ESA ha dado a conocer sus planes, que incluyen ir completando la red de satélites necesaria para que en 2014 entre por fin en vigor uno de los proyectos retrasados del organismo: el sistema de navegación Galileo, la competencia al GPS estadounidense.
Lanzamientos y aportaciones
Si todo marcha según lo previsto, el 9 de febrero de 2012 despegará del centro espacial de Kurú, en la Guayana francesa, Vega, el lanzador más pequeño de la gama europea, hermano menor de Ariane y Soyuz. Este aparato es capaz de colocar en órbita satélites de tamaño reducido, cada vez más importantes tanto científica como económicamente, y su llegada al espacio –que en realidad debería haberse producido a finales de 2011- abrirá el presente año para la ESA y supondrá al mismo tiempo el cumplimiento de uno de los puntos álgidos de su actual programa.
Desde el mismo Kurú iniciará el 1 de marzo su andadura hacia la Estación Espacial Internacional la mayor nave de transporte diseñada por la ESA. La tercera versión de las ATV (ATV-3), bautizada con el nombre del físico italiano Edoardo Amaldi, llegará a la ISS el 9 de marzo y portará consigo alimentos, agua potable y material de mantenimiento e investigación. Cinco de estas cápsulas han sido construidas a modo de aportación europea a la Estación Internacional.
Otra de las contribuciones de la ESA a la astronomía mundial en este 2012 será MIRI, un instrumento que capta el infrarrojo medio y formará parte del telescopio James Webb, el sucesor de Hubble. Gracias a MIRI se espera poder contemplar estrellas y galaxias lejanas, cometas de baja luminosidad e incluso el cinturón de Júpiter. En noviembre, la Agencia europea planea hacer entrega de otra pieza del James Webb: NIRSpec, un espectrómetro que registra el infrarrojo cercano.
Más satélites y una cámara gigantesca
Entre la técnica que se renueva en 2012 se encuentran también los satélites meteorológicos Meteosat, cuya tercera generación (MSG-3) promete ofrecer una predicción aún más exacta del tiempo de la que ya otorgaban sus exitosos antecesores (MSG-1 y MSG-2).
Para estudiar el campo magnético de la Tierra y los cambios que en él se producen fue creada la flota de satélites Swarm, que deberá emprender este julio sus labores espaciales. Y la siguiente pareja de satélites IOV, que han de formar la red que requiere el sistema de navegación europeo Galileo, se lanzará de agosto a septiembre.
A finales de año inaugurará la ESA una nueva antena destinada a seguir y recibir datos de las misiones interplanetarias, que esta vez se situará en Malargüe, Argentina. E igualmente en noviembre de 2012 quiere la Agencia que esté terminado el instrumental científico de la sonda espacial GAIA, que incluye la cámara digital más grande jamás puesta en órbita y con la que en 2013 se planea llevar a cabo el mayor y más exacto mapa tridimensional de nuestra galaxia.
Autor: Luna Bolívar
Editora: Rosa Muñoz Lima