España: termina juicio contra independentistas catalanes

Tras cuatro meses de audiencias, el Tribunal Supremo español (TS) finalizó este miércoles (12.06.2019) el histórico juicio a doce líderes independentistas por el fracasado intento de separar a Cataluña de España en 2017, quedando a la espera de una sentencia que se anuncia muy sensible políticamente y que deberá resolver si varios procesados promovieron la violencia y cometieron un delito de rebelión, como afirma la fiscalía.

En la sesión final, los acusados se expresaron por última vez, lamentando que la justicia se vea abocada a solventar un "problema político" y reivindicando el diálogo como salida a la persistente crisis catalana. "Votar o defender la República desde un Parlamento no puede constituir delito”, afirmó el principal acusado, el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras. Hay que "devolver la cuestión al terreno de la política (...) de donde nunca debería haber salido”, señaló.

"El poder judicial no puede resolver un problema político”, aunque ahora los magistrados tienen la "responsabilidad de no agravar la crisis”, dijo Jordi Sánchez, exlíder de una influyente asociación independentista, que al igual que sus compañeros de banquillo reivindicó el carácter pacífico del movimiento. La fiscalía piensa distinto: para los investigadores, el proceso secesionista fue "un golpe de Estado” por medio de una "insurrección” con violencia "suficiente” y "evidente”, promovida por los acusados, que actuaron como "una organización criminal”.

Manifestación en Barcelona

Tras más de 50 sesiones televisadas, centenares de testigos, incluido el expresidente del gobierno español Mariano Rajoy, y copiosas pruebas presentadas, ahora toca a los siete miembros del alto tribunal emitir un fallo, que no se espera antes de otoño y que los acusados prevén recurrir ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Varios abogados defensores admitieron el delito de desobediencia, que no implica cárcel, pero recalcaron que no hubo violencia ni alzamiento tumultuario, y acusaron a la fiscalía de poco rigor, exagerar y forzar sus argumentos. Con el principal protagonista de la tentativa secesionista huido en Bélgica, el expresidente regional Carles Puigdemont, la cara más visible del proceso fue Junqueras, para quien la fiscalía pide 25 años de cárcel.

En Barcelona, en tanto, cientos de personas se reunieron en horas de la noche de este miércoles con motivo del final del juicio del 'procés' en el Tribunal Supremo. Algunos de los asistentes a la movilización exhibieron pancartas con lemas como "Libertad. La autodeterminación es un derecho”, "Ni un paso atrás”, "Lo volveremos a hacer” y exclaman consignas como "No son presos, son rehenes”, "No es un juicio, es una venganza”, "Libertad presas políticas” o "Unidad”.

DZC (EFE, AFP)

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