España busca éxito histórico ante Alemania

Mientras para España el partido es un "hito importantísimo" porque es la tercera gran final de su historia y la primera en 24 años, Alemania, que tiene tres títulos mundiales y tres europeos, desea un título 12 años después que refrende la regeneración iniciada en 2004 con Jürgen Klinsmann y continuada por Joachim Löw tras el ilusionante Mundial en casa en 2006, culminado con el tercer puesto.

"Favoritos ahora mismo entre Alemania y España no hay. Si Alemania es un poco más favorita es porque está un poco más acostumbrada a llegar a las finales... Los alemanes son alemanes, y cualquiera que juega contra ellos pierde, solía decir (Gary) Lineker", recordó Luis Aragonés, técnico español.

España ha alcanzado en Austria su mayor grado de confianza en décadas. Con una defensa firme y el juego vistoso de siempre, la "roja" mostró un alto grado de competitividad para pasar la barrera histórica de cuartos de final ante Italia y golear a Rusia en semifinales.

España: fútbol técnico y de control de balón

Con ese mismo fútbol técnico y de control de balón quiere alcanzar un título que no conoce desde hace 44 años para ubicar a la selección entre las grandes potencias europeas, escalón que ocupan desde siempre sus exitosos clubes.

"No sé si Alemania nos dejará tener tanto el control de balón,

vamos a ver si lo permiten, si saben dónde presionarnos y dónde hacernos daño, pero se les hace difícil a nuestros rivales, sobre todo cuando le ponemos velocidad al balón", dijo Aragonés, que no renunciará al estilo de juego español.

La única mala noticia es la baja por lesión de David Villa, el

máximo goleador del certamen con cuatro tantos, que será sustituido por el centrocampista Cesc Fábregas. El alemán Lukas Podolski amenaza el título de artillero de Villa con sus tres goles.

En Alemania sólo preocupa el estado del centrocampista Torsten Frings, que a pesar de tener molestias en una costilla podrá jugar.

Alemania: con tropezones hacia la final

Los germanos tuvieron durante la Eurocopa un camino más irregular que el de la inmaculada ruta española. Ante Portugal el equipo de Löw brilló en cuartos, pero sufrió en semifinales ante Turquía. Su fútbol es intermitente y ante la calidad técnica española Alemania quiere oponer sus valores tradicionales, su experiencia en las finales, esos intangibles que conforman su ADN de campeón.

El mánager, Oliver Bierhoff, instó a los jugadores de su equipo a que "muestren corazón y dejen todo lo que tienen" sobre el césped del estadio Ernst Happel. "La motivación para la final es alta, es importante tener coraje.

Exigimos concentración y dedicación, sobre el resto no se puede influir". "Tienen mucha calidad, pero es una final. Uno necesita cualidades especiales, y nosotros las tenemos", dijo el defensa alemán del Real Madrid Christoph Metzelder.

"Menos fútbol, más experiencia"

"Pueden jugar increíblemente rápido. Hay que tener mucho cuidado, sobre todo en la zona central de la defensa. Los vi contra Grecia, con el equipo B, y juegan con un ritmo increíble. Están merecidamente en la final", dijo a la agencia dpa Franz Beckenbauer, icono del fútbol alemán.

Ambos equipos se pueden dar por satisfechos por haber llegado a la final. No será un fracaso perderla, pero el título servirá para presentar a ambas selecciones como referencias de futuro.

"Seguimos haciendo historia, queremos conseguir el título.

Alemania es muy fuerte, históricamente nos llevan ventaja, pero debemos seguir con la filosofía que nos ha hecho estar en la final", pidió Xavi, el "cerebro" del talentoso grupo español, que quiere quitarse todos sus complejos históricos ante una Alemania con menos fútbol pero más experiencia.