España aprueba pacto antiyihadista

El Congreso de los Diputados de Españaha ha dado luz verde al acuerdo alcanzado por el jefe del gobierno español, Mariano Rajoy, y el líder de la oposición, el socialista Pedro Sánchez, con el objetivo de luchar contra el terrorismo yihadista tras los atentados que tuvieron lugar en París en enero.

El pacto de Estado, el primero alcanzado entre ambos líderes, fue criticado por la mayor parte de las fuerzas de la oposición, que decidieron no apoyarlo en la votación tras calificarlo de "bipartidista y electoral".

Rajoy y Sánchez lo firmaron el pasado 2 de febrero tras dejar a un lado sus diferencias sobre uno de los puntos más controvertidos del texto: la prisión permanente revisable para los terroristas, con la que el PSOE no estaba de acuerdo.

Éste fue el principal escollo para recabar el apoyo de otros grupos parlamentarios, que lo consideraron un eufemismo de la cadena perpetua. La introducción de este punto también le costó numerosas críticas al Partido Socialista (PSOE) de Sánchez, que firmó el pacto a pesar de haberse opuesto antes a que el Partido Popular (PP) de Rajoy introdujera la prisión permanente revisable en el Código Penal.

El documento aprobado hoy, que será tramitado como proposición de ley, supone el cuarto pacto firmado por el PP y el PSOE en materia antiterrorista en 30 años, pero el primero que no se dirige contra el grupo armado vasco ETA, sino contra el terrorismo yihadista.

Ataque contra Charlie Hebdo

Fue impulsado tras los atentados que tuvieron lugar en enero en París contra la revista satírica "Charlie Hebdo" y un supermercado judío, a raíz de los cuales el gobierno español elevó el nivel de alerta antiterrorista.

España sufrió el 11 de marzo de 2004 el peor atentado terrorista de su historia reciente, en el que murieron 191 personas y más de 1.500 resultaron heridas por la explosión de varias bombas en trenes en Madrid, atribuidas a una célula yihadista.

Desde entonces, las fuerzas de seguridad del Estado han detenido a decenas de yihadistas, la mayoría de ellos relacionados con el Estado Islámico (EI) y Al Qaeda. (dpa)