En Paraguay también ganó Taiwán

El periódico Frankfurter Allgemeine Zeitung dedica un artículo de corresponsal a la victoria electoral de Santiago Peña, candidato del partido Colorado, el que ha gobernado en Paraguay desde hace décadas, con una sola interrupción: "Con su triunfo, Peña rompe una tendencia en América Latina, donde en casi todas las elecciones de los pasados años ha perdido el partido gobernante, lo que condujo a un desplazamiento hacia la izquierda en la región. (…)

Las elecciones también fueron seguidas con gran interés en China y Taiwán. Paraguay se cuenta en el decreciente grupo de 13 países -en su mayoría pequeños Estados insulares- que mantienen relaciones diplomáticas con Taiwán y no con China. Mientras (su rival) Efraín Alegre dio a entender que podría dar la espalda a Taiwán, Peña habló de mantener esas relaciones. Pero la presión para que busque un acercamiento a China probablemente aumente. Precisamente las influyentes asociaciones agropecuarias están molestas por los obstáculos a la exportación de soja y carne vacuna a China. En una entrevista, Peña dijo que, a largo plazo, Paraguay se beneficia más de las relaciones con Taiwán que de unas relaciones con China orientadas a la venta de materias primas”.

El triunfo de los gobernantes sempiternos

El rotativo Tageszeitung indica que, para muchos, Peña no es más que el lugarteniente del expresidente paraguayo Horacio Cartes, y apunta: "A todas luces, la oposición no logró traducir las acusaciones de corrupción contra Cartes y sus presuntas implicaciones en el tráfico de drogas y negocios de contrabando, en suficientes votos contra su candidato. Y eso que la oposición tuvo incluso apoyo de Estados Unidos. En junio pasado, Cartes fue acusado en EE. UU. de obstruir investigaciones internacionales contra el crimen organizado. (…)

A pesar de eso, Estados Unidos probablemente esté satisfecho con el triunfo de Peña, el hombre de confianza de Cartes. Paraguay es el único aliado diplomático de Taiwán en Sudamérica y uno de los 13 que le van quedando a nivel mundial”.

¿Un expresidente falsificador?

Otro expresidente latinoamericano, esta vez de Brasil, es objeto de un artículo en el diario Süddeutsche Zeitung. El motivo fue el allanamiento de la casa de Jair Bolsonaro: "Al final de un largo día con allanamientos, detenciones, acusaciones, justificaciones y, al parecer, casi también con lágrimas, en Brasil, el miércoles quedó claro que Jair Bolsonaro se ve sometido a cada vez mayor presión. El expresidente de extrema derecha podría verse vetado para cargos políticos y, al final, incluso terminar en la cárcel. (…)

Seis colaboradores de Bolsonaro fueron detenidos, entre ellos, dos empleados de seguridad y un cercano asesor. Se los acusa, a ellos y al expresidente, de haber formado parte de una trama criminal que habría introducido datos falsos de vacunación en las redes del sistema de salud brasileño. ‘De ese modo, las personas pudieron emitir certificados de vacuna y utilizarlos para burlar las restricciones sanitarias impuestas por las autoridades (de Brasil y Estados Unidos)', indicó la declaración difundida por la Policía. (…) El expresidente de extrema derecha se ve ahora ante un dilema: o bien los datos de vacunación de él y su hija Laura, de 12 años, entregados al sistema de salud brasileño, son falsos, o Bolsonaro no dice la verdad en cuanto a su inmunización, pese a todas sus aseveraciones de que no se vacunó. Lo primero podría ser incluso un acto punible. Lo segundo equivaldría a una traición a la base política de Bolsonaro”.

(cp)