El traje blanco de Kamala Harris no es moda, es historia
9 de noviembre de 2020Kamala Harris, la primera mujer que accede a la Vicepresidencia en Estados Unidos, rindió el sábado pasado (07.11.2020) un vibrante homenaje a las generaciones de mujeres que "allanaron el camino" para su elección, asegurando que ella no será "la última".
La vicepresidenta electa homenajeó a su madre, Shyamala Gopalan Harris, quien llegó a Estados Unidos procedente de India a la edad de 19 años. Activista de los derechos civiles, esta investigadora del cáncer de mama murió en 2009.
"Ella no podía haber imaginado este momento, pero creía profundamente en un Estados Unidos donde un momento como este sería posible", dijo a una multitud de simpatizantes reunidos en Wilmington, Delaware, para celebrar la victoria de Joe Biden. "Pienso en ella, en las generaciones de mujeres, negras, asiáticas, blancas, latinas, nativas americanas, que allanaron el camino", sostuvo.
Del mismo modo, Harris elogió a quienes "se han sacrificado tanto por la igualdad, la libertad y la justicia para todos, incluidas las mujeres negras, a quienes se desprecia con demasiada frecuencia pero que a menudo demuestran que son la columna vertebral de (la) democracia" estadounidense.
Celebración en un traje sastre blanco
Así, en línea con su homenaje a todas las mujeres que "allanaron el camino", Harris vistió, para su discurso triunfal de noche en Wilmington, un traje sastre blanco.
El color blanco se ha asociado durante mucho tiempo con el movimiento por el sufragio femenino, y su larga lucha por el derecho al voto de la mujer, adoptado como símbolo de pureza moral junto con el verde para la esperanza y el púrpura para la dignidad.
Durante su discurso, la exfiscal y luego senadora recordó la larga lucha de las mujeres por el derecho al voto: "Hace cien años con la 19 Enmienda, hace 55 con la ley del sufragio, y ahora, en 2020, con una nueva generación de mujeres que pusieron su boleta en las urnas y prosiguieron la lucha por el derecho fundamental a votar y a ser escuchadas".
Larga lista de mujeres que abrieron el paso
Pero más allá de las sufragistas, la elección deliberada de Harris por el atuendo también fue un gesto de solidaridad con la larga lista de mujeres que han desafiado las expectativas en la política estadounidense.
Harris homenajeó personajes como Shirley Chisholm, quien también vistió de blanco cuando se convirtió en la primera mujer afroamericana electa al Congreso en 1968, o Geraldine Ferraro, la primera mujer en la historia de Estados Unidos en ser candidata a la Vicepresidencia, quien también vistió completamente de blanco para aceptar el papel de compañero de fórmula de Walter Mondale en su campaña presidencial de 1984.
Y recientemente, siguió los pasos de Hillary Clinton, quien visitó un traje de pantalón blanco para aceptar la nominación presidencial demócrata en 2016, y de las mujeres demócratas en el Congreso, en febrero de 2019, que se habían vestido de blanco durante el discurso sobre el Estado de la Unión de Donald Trump.
La blusa con lazo en el cuello de Harris también tuvo un peso histórico. Evocó la vestimenta poderosa de Margaret Thatcher, que usaba las suyas de la misma manera que sus colegas masculinos usaban corbatas, una metáfora apropiada de cómo la primera primera ministra del Reino Unido cooptó y rehízo las reglas de la política británica de la década de 1980.
Harris dejó de manifiesto que hoy hace parte de esta larga historia, pero que no será la última: "No seré la última", afirmó, "porque cada niña que mira esta noche ve que esta es una tierra en donde todo es posible".
FEW (AFP, EFE, CNN, The New York Times)