El Perseverance ha depositado 4 de sus 10 tubos de muestra
6 de enero de 2023El rover Perseverance de la NASA ha posicionado en Marte su cuarto tubo de titanio relleno con muestras de roca en las cercanías del cráter Jezero, completando así el 40% de esta misión, según informó el miércoles (04.01.2023) la agencia espacial.
"Depósito de muestras: ¡40% completado! Otro exitoso posicionamiento de tubos se suma a mi creciente colección aquí en la ubicación de 'Three Forks'. Cuatro de los 10 tubos que dejaré aquí como reserva están en su posición", afirmó la cuenta de Twitter del Perseverance.
El sitio "Three Forks" (Tres tenedores, en español) no fue un lugar fácil de encontrar. Para llevar a cabo exitosamente esta misión de depósitos, los expertos de la NASA necesitaban una zona que estuviera nivelada y libre de rocas en un planeta que es notoriamente rocoso.
Tubos de titanio con muestras en su interior
En el marco del programa Mars Sample Returns, y en un plazo de dos meses, el rover de la NASA dejará un total de 10 tubos de reserva sobre la superficie marciana.
Un total de 43 de estos tubos de titanio, que miden unos 15,2 centímetros de largo, han sido llevados a Marte con el Perseverance. Se estima que 38 de estos artefactos serán llenados con muestras de polvo, tierra y rocas marcianas. Los 5 restantes se usarán para medir la limpieza del sistema de muestreo, según informó la agencia espacial.
Un plan de respaldo
Se trata de un operación alternativa de respaldo en caso de que el Perseverance no logre llevar las muestras que posee en su interior (tiene 17) a un módulo de aterrizaje robótico, desde donde estos materiales serán transportados a la Tierra, presumiblemente en 2033.
"El módulo de aterrizaje usaría un brazo robótico para colocar las muestras en una cápsula de contención a bordo de un pequeño cohete que despegaría a la órbita de Marte, donde otra nave espacial capturaría el contenedor de muestras y lo devolvería a salvo a la Tierra", explicó la NASA.
La idea es traer estas muestras a nuestro planeta para poder estudiar la geología y las características del planeta, pero también para averiguar si estas contienen rastros de vida microbiana, y de paso, determinar si el planeta rojo albergó algún tipo de vida.
Editado por José Ignacio Urrejola