El peligroso legado de Bin Laden
2 de mayo de 2013En 2001, las imágenes del derrumbe del World Trade Center en Nueva York, dieron vuelta al mundo. Aproximadamente 3.000 personas murieron a manos de 19 miembros de la red terrorista Al Qaeda que secuestraron cuatro aviones, estrellándolos luego contra las Torres Gemelas y el Pentágono cerca de Washington. Otra nave cayó en un campo en Pensilvania.
Acto seguido, los EE.UU. le declararon “la guerra al terrorismo”: el ejército y los servicios secretos cazaron a los instigadores del atentado terrorista sin precedentes, pero, sobre todo, cazaron a Osama bin Laden, fundador de Al Qaeda. Casi diez años después, el Presidente Barack Obama anunció: “Los EE.UU. han llevado a cabo una operación en la que ha muerto el líder de Al Qaeda, Osama bin Laden.”
Pero Al Qaeda todavía existe aunque en otra forma que en 2001. Según expertos en terrorismo, queda un núcleo de 300 combatientes: éstos se han reunido alrededor del sucesor de Bin Laden, Aiman Al Sawahiri, en la región fronteriza entre Pakistán y Afganistán. Además, existen grupos islamistas en África del Norte, en Oriente Próximo y en la península Arábiga, que a veces utilizan el nombre de Al Qaida, pero persiguen metas propias.
Un liderazgo debilitado
El investigador de ciencias del Islam, Guido Steinberg, de la fundación alemana Ciencia y Política en Berlín, cree que la muerte de Bin Laden ha debilitado claramente a Al Qaeda. La organización ya no cuenta con un líder carismático que esté por encima de las peleas interiores. “El actual líder, el egipcio Aiman Al Sawahiri, siempre ha sido un personaje controvertido dentro de la organización”, afirma el especialista.
No obstante, Al Sawahiri está al mando de la red terrorista, cuenta el periodista y experto en Al Qaeda, Yassin Musharbash, en entrevista con DW. En videos y discursos, el líder y su cuadro “representan la imagen de la central de Al Qaeda en el exterior. Eso tiene carácter vinculante y fija las pautas ideológicas”, señala.
Al Qaeda: los socios y las filiales
A parte del núcleo de Al Qaeda también existen grupos o movimientos oficiales cercanos a esta red terrorista, indica Musharbash. “Esas filiales se encuentran en Iraq, África del Norte y en la península Arábiga. En Somalia, la milicia Shabaab, que se ha subordinado a Al Qaeda, es muy activa”. Asimismo, la red terrorista opera sobre todo en Algeria, Mali y Libia. También en Irak las actividades terroristas van en aumento. Se estima que existen más de mil miembros de Al Qaida en ese país.
También en Siria la lucha de diferentes grupos rebeldes contra el régimen de Al Assad ha fortalecido a los islamistas, explica Musharbash: “En Siria opera el Frente Al Nosra, el grupo de combate más fuerte en la actualidad.” Por el momento, este grupo terrorista no representa un peligro para el exterior. Pero cuando colapse el régimen de Al Assad esto podría cambiar rápidamente. El Frente Al Nosra podría intentar de establecer un pequeño emirato en Siria y atacar a Israel, dice el experto.
Recientemente, en los medios, apareció una organización de nombre Al Qaeda en Irán. Investigadores canadienses acusan a los miembros de haber planeado un atentado a un tren de larga distancia.
Pocos miembros, mucho apoyo
Yassin Musharbash estima “que no existen más de 10.000 personas en el mundo que se consideren miembros de Al Qaida”. Pero, más allá de esto, hay muchos grupos de apoyo.
Según Steinberg, todos estos grupos tiene sus propias estrategias y tácticas. En parte, Al Qaeda hasta espera que actúen de manera autónoma.
En los países occidentales la cantidad de atentados terroristas ha disminuido significativamente gracias al éxito estadounidense en la lucha contra el terrorismo, en la que han muerto varios líderes de Al Qaeda. Sin embargo, el experto advierte que “en el mundo islamista esta red es cien veces más activa que en el exterior. No debemos subestimar al grupo. En momentos cruciales, Al Qaeda siempre se ha sabido reinventar y eso es algo que actualmente estamos presenciando”, afirma Musharbash.
Autor: Günther Birkenstock/ VC
Editor: Enrique López Magallón