El Papa canoniza a niños latinoamericanos
15 de octubre de 2017En un acto celebrado en la Plaza de San Pedro del Vaticano este domingo (15.10.2017), el papa Francisco proclamó a 35 nuevos santos, entre ellos tres niños mexicanos –los llamados "Mártires de Tlaxcala”–, asesinados entre 1527 y 1529, y treinta brasileños, asesinados en 1645. Durante la ceremonia también fueron canonizados el sacerdote español Faustino Míguez (1831-1925), fundador del Instituto Calasancio Hijas de la Divina Pastora, y el capuchino italiano, Angelo da Acri.
Para asistir a la ceremonia viajaron a Roma centenares de mexicanos de Tlaxcala y una amplia delegación religiosa encabezada por el obispo de la diócesis, Julio C. Salcedo Aquino, y los cardenales José Francisco Robles Ortega y Alberto Suárez Inda. La delegación institucional mexicana estuvo compuesta por el director general adjunto de Asuntos Religiosos de la Presidencia de la República, Roberto Herrera Mena, y autoridades de Estado de Tlaxcala.
Los mexicanos canonizados son Cristóbal, Juan y Antonio, que tenían entre 12 y 13 años cuando fueron asesinados, en 1527 el primero y en 1529 los otros dos, por convertirse al catolicismo. Los tres niños habían sido beatificados el 6 de mayo de 1990 en la basílica de Guadalupe por Juan Pablo II. Los treinta nuevos santos brasileños están considerados los primeros mártires del país; fueron asesinados entre el 16 de julio y el 3 de octubre de 1645 por protestantes calvinistas holandeses.
El papa Juan Pablo II les beatificó a los brasileños el 5 de marzo de 2000 en la basílica de San Pedro. Los asesinatos de los sacerdotes Andrés de Soveral y Ambrósio Francisco Ferro, así como del laico Mateus Moreira y otros 27 fieles brasileños se produjeron en el contexto de lo que en Brasil se conoce como las "invasiones holandesas". El conflicto, que comenzó en 1599 y finalizó en 1661, consistió en pugnas territoriales entre las coronas portuguesa y holandesa.
La zona en disputa es la región nordeste de Brasil. La querella también giraba en torno al control del incipiente comercio de la caña de azúcar. A su vez, disputas religiosas enfrentaron a los católicos portugueses con los calvinistas holandeses. Los hechos por los cuales el papa Francisco canoniza a estos mártires del catolicismo remiten a dos matanzas llevadas a cabo por súbditos de la corona holandesa, que gobernaban lo que hoy es el territorio del Estado de Río Grande do Norte.
ERC ( dpa / EFE )